Está noche desde las 21:00 (Star+ y ESPN),Danubio se juega una chance histórica: clasificar a octavos de final de la Copa Sudamericana ante Emelec. Para eso tendrá que ganar o empatar y esperar el resultado del encuentro entre Guaraní y Huracán que se jugará a la misma hora.
Los últimos partidos del equipo franjeado han tenido un protagonista que sorprendió a muchos: el colombiano Jannenson Sarmiento.
El jugador nacido en Barranquilla, llegó a filas del equipo de la Curva proveniente del fútbol de República Dominicana y luego de una temporada en la tercera de Javier “Cabeza” Delgado, tuvo sus primeros minutos en el primer equipo de la mano de Esteban Conde.
Su nombre se viralizó gracias a una insólita confesión: mientras iba a patear el penal que le dio la clasificación a Danubio a la fase de grupos de la Copa Sudamericana, cantaba “En el mercho” para paliar los nervios. Además, en el último partido del franjeado por el Torneo Intermedio anotó doblete ante La Luz y le dio la punta del grupo B al equipo.
Su historia.
Sarmiento nació en Barranquilla (Colombia) en octubre de 1999. Probó suerte en el fútbol de República Dominicana y luego recaló en Uruguay. Hace más de dos años está en esta parte del mundo y desde entonces no ve a su familia.
“La manera en cómo llegué a Uruguay fue un poco particular. Antes de estar acá estaba en República Dominicana, jugaba ahí. Luego, por parte de mi empresario, Alejandro Comesaña, quien es uruguayo, surgió la posibilidad de llegar a Uruguay. Era una buena chance, por lo que brindaba el fútbol y porque tenía un buen reconocimiento por la historia de Uruguay”, contó el delantero a Ovación.
Su primer equipo no fue Danubio, sino otro conjunto de Primera División: “Fui una semana a entrenar a Montevideo City Torque, por circunstancias de la vida fui tres días y nunca me dijeron nada. Ahí fue donde me probé en Danubio. Fui a la tercera, por suerte y gracias a Dios, se dio con el entrenador Javier "Cabeza" Delgado. Ahí jugué ese año en tercera. Me hicieron un contrato, pero el primer año con Jorge (Fossati) nunca tuve chance de jugar y hasta este año que con el Coco (Conde), que me dio toda la confianza para estar en el plantel de primera”, relató.
Pero estos casi dos años no han sido todo color de rosas, reveló a Ovación. “Hace casi dos años que no veo a mi familia y a veces, por ahí, emocionalmente eso te destruye, te mata. He tenido noches en las que llegué y lloré como un niño de tres años cuando le quitan el juguete. Pero con el tiempo he entendido que es parte del sacrificio y a raíz de eso he tenido unas muy buenas semanas en los entrenamientos. Creo que eso en principio me ha ayudado a tener muchas más chances”, detalló.
Afortunadamente, las cosas empezaron a salir. Algunas lesiones en sus compañeros y el buen entrenamiento, abrieron una brecha, por lo que tuvo continuidad en los últimos encuentros.
El buen momento
El delantero colombiano pasa por su mejor momento y confesó que es desde que ingresó, con muy buen nivel, por Copa Sudamericana ante Huracán: “Desde ese partido sentí que la confianza subió a un 100% y desde ese entonces me he sentido muy tranquilo, tampoco es que se haya ganado mucho, pero en confianza si”, aseguró.
Y añadió: “A veces emocionalmente estás mal y no se te dan las cosas, entonces ahora hay que aprovechar este plus; por suerte a estos partidos salió lo que se entrena y por lo que me he preparado. Anotar goles es muy gratificante porque uno de los mayores sueños del futbolista, y qué mejor manera de marcar dos, entonces doble la felicidad”.
El futbolista contó que su familia no ha podido visitarlo porque las cosas no son fáciles: “Ahora en Colombia no se está pasando por un buen momento en lo económico, así que entonces por ese lado es lo que es más complejo, pero bueno, sintiéndome a la lejanía y extrañándolos un poco. Eso ahora es un plus más para bueno para seguir esforzándome y así poder tenerlos cerca lo más rápido posible”, agregó.
Con ilusión de triunfar y poder estar cerca de su familia, Sarmiento destacó: “He aprendido a creer un poco más que cuando uno está más positivo las cosas siempre salen, entonces ahí la voy llevando tranquilo“.
La historia del gol a Defensor y “El mercho”
La noche del 8 de marzo, Danubio consiguió romper la maldición y clasificó a la fase de grupos de la Copa Sudamericana. Jannenson Sarmiento fue el responsable del penal que le dio el pase al equipo franjeado.
“Ese será uno de los recuerdos que más guardaré en mi corazón, por las circunstancias en las que estábamos; el penal, que no era fácil, al rival clásico; en una competición internacional que, por ahí a veces, uno soñaba, pero no lo imaginaba que iba a pasar tan fácil estar jugando un torneo internacional. Años anteriores no estaba en ningún equipo profesional y era lo que más soñaba y ahora que se está dando es como que a veces no caes. Con tranquilidad se va llevando y después de ese gol la confianza ha subido muchísimo”, confesó.
La noche de la clasificación, en el Espacio DFC de twitter, el delantero contó que mientras iba a patear el penal cantaba para sí: “En el mercho, escuchando fercho” y la anécdota se viralizó.
Sobre aquel hecho contó: “Los nervios cada quien lo lleva a su manera, yo quise hacerme sentir tranquilo y sirvió”.
Para festejar sus goles, ahora, hace el baile de la popular canción: ”Ahora queda como una marca registrada y espero que se siga repitiendo”, bromeó.
El regreso de los campeones
En los últimos días volvieron Mateo Ponte y Franco “Cepillo” González a las filas franjeadas tras consagrarse campeones del mundo con la selección de Uruguay Sub 20. El delantero reconoció el valor de sus compañeros:
“Es una alegría enorme porque son compañeros que hacen parte del cuadro y lo engrandecen y enriquecen el nivel de del grupo”, indicó.
Y agregó: “Estoy muy feliz por ellos por todo lo que lo que aportan. No es un secreto lo que es el Cepi para el equipo y estoy muy contento por lo que están viviendo y que ahora vengan y hacen por el nivel del grupo”.
El partido con Emelec
La buena racha se siente y Sarmiento reconoce que trabajaron para eso: “Es algo que realmente planificamos porque para nadie es un secreto que los resultados no se estaban dando; a veces lo externo o lo de afuera afecta. Nos estábamos dejando llevar mucho por todo eso, pero es parte de la presión del hincha, entonces como grupo nos propusimos que teníamos que sacar esto adelante”, remarcó.
Sarmiento reconoció que lo más importante ahora es afrontar el cruce con Emelec: “Estamos a nada de una clasificación histórica y estamos enfocados, concentrados en cada detalle y esperemos que en el partido las cosas salgan como queremos”, remarcó.
El equipo está confiado, reconoció, pero dijo que lo más importante es que están tranquilos con el trabajo de todos los días y que la clave es “creer” en ellos mismos.