El regreso del "Chengue"

1/1: Leonardo Carreño 300x300 (Leonardo Carreño)

DANIEL ROSA

Todos los objetivos que Nacional se trazó ayer a la tarde, los cumplió. Ganó los tres puntos ante Tacuarembó, afianzó su confianza de cara al clásico al golear 4-1, recuperó al "Chengue" Morales en su faz goleadora con un doblete y cuidó al argentino Pereyra y al juvenil Ferreira, que estaban con cuatro tarjetas amarillas. En resumen, Nacional preparó el clásico con una tarde redonda.

¿Más lecturas positivas que dejó el partido para los tricolores? Por momentos volvió a mostrar buen funcionamiento colectivo; tuvo entereza anímica para dar vuelta en forma contundente un resultado que se le presentó adverso a los 10 minutos; consiguió su tercer triunfo consecutivo y ello le permite no sólo llegar al clásico arriba de Peñarol, sino acercarse hasta sólo tres puntos de Danubio, algo muy importante pensando en la Tabla Anual.

Los tricolores jugaron un muy buen primer tiempo, con una propuesta netamente ofensiva basado en el vértigo que le impusieron Perrone y Fornaroli por las bandas, la inteligencia de Ligüera para manejar al equipo y la contundencia del "Chengue" Morales.

La falencia volvió a estar en el sector izquierdo de la defensa. Romero tuvo problemas con los desbordes de Nicolás Pereira y por allí Tacuarembó encontró la veta. Julio César Antúnez, técnico de los del Norte, leyó bien el partido y mandó a atacar por ese sector. No se equivocó. Ryder O`Neill le robó el balón en la salida a "OJ" Morales, lo abrió para Franco Sosa por izquierda, éste mandó el centro al segundo palo y por allí apareció Nicolás Nicolay en soledad para, de cabeza, poner el 1-0 inmerecido.

Nacional siguió atacando y rápidamente empató con un cabezazo de Victorino a los 13`. El mediocampo de Tacuarembó ya no paraba a nadie y la jugada que marca la pauta de que el engranaje tricolor está aceitándose adecuadamente fue la que generó el segundo gol.

Fornaroli arrancó a toda potencia y velocidad en su campo y por la izquierda, habilitó a Ligüera, éste abrió hacia la derecha a Perrone, centro y cabezazo del "Chengue" a la red. Una gran jugada porque combinó lo más difícil del fútbol: velocidad y precisión.

Antúnez volvió a leer bien el partido y metió un cambio en el medio que emprolijó la cosa, pero no pudo revertir la situación. El ingreso de Argachá al lateral izquierdo y el pasaje de Techera al medio le dio más solvencia a la zona central, aunque Nacional siguió dominando. Llegó el tercero, otra vez obra del "Chengue" (aunque en doble posición adelantada, primero de Romero y luego de Morales) y Nacional se fue al descanso con el partido definido.

En el complemento se dedicó a manejar la pelota, aún sin cuidarla bien. Fue como el boxeador que sabe que en cualquier momento puede noquear y que además está tranquilo porque los golpes del rival no lastiman. Tacuarembó llegó, pero sin contundencia. Nacional lo hizo tres veces y anotó un gol más, como para llegar al clásico con la confianza plena.

3 goles lleva Richard Morales desde que volvió. El anterior fue a Central Español en la séptima fecha.

Nacional estudia un proyecto para las divisiones juveniles presentado por el empresario argentino César Menotti hijo, quien trajo al club a Juan Pablo Pereyra. La idea es iniciar un cambio futbolístico desde abajo.

El nombre del profesor Jorge Franco circuló con mucha fuerza para ser el preparador físico de Peñarol. Sin embargo, desde hace tiempo Nacional lo quiere para las divisiones juveniles. Está muy cerca de llegar a Los Céspedes.