Estoy de acuerdo”. Así comentaba el ahora candidato oficial del Frente Amplio al ministerio de Economía, Gabriel Oddone, una frase de la actual jerarca Azucena Arbeleche sobre el plebiscito de la seguridad social. Y no era una frase cualquiera, ya que Arbeleche, tal cual es su costumbre, no se andaba con medias tintas. Allí decía que “magia no existe, si sale el plebiscito, esto terminará en un sistema insostenible o en un aumento de impuestos”.
El acuerdo de Oddone con la mirada alarmante de Arbeleche no fue algo casual, si bien el economista comparte con varios colegas sesentones una indisimulable tirria hacia la actual jerarca, que cada tanto permea en sus declaraciones y en sus hasta hace poco “ecuánimes” lecturas de la economía del país. Oddone firmó (algunos dicen que redactó) la carta de los ciento y pico de “profesionales de la economía” afines al Frente Amplio que alertaban sobre la debacle económica que enfrentaría el país de salir el “Sí” en el plebiscito que impulsa el Pit-Cnt.
Hay que recordar el sonoro reto que la izquierda más dura del FA emitió a esos profesionales, incluso con una oferta de debate del senador Andrade de la que nadie levantó el guante.
Pero hace pocos días, en una charla organizada por el Wilson Center en la que Oddone participó junto al expresidente Lacalle Herrera, o la prestigiosa economista compatriota Amparo Mercader, compartió que de aprobarse el “Sí” el país viviría una situación muy compleja. Tanto, que la comparó con la crisis del 2002, ya que mencionó ese episodio trágico como una señal de que el Uruguay lograba sobreponerse a desafíos mayúsculos. Lo que no dijo Oddone fue a qué precio el país se sobrepuso a esa tragedia.
Y sin embargo, pese a esas declaraciones de hace apenas semanas, ahora Oddone en su nuevo rol político, dice que de caer el sistema previsional del país en el plebiscito, “no sería el fin del mundo”. ¿No? ¿Qué cambió en apenas unos días?
Lo único que cambió es el ingreso de Oddone a la política partidaria. Y su necesidad de no irritar a los grupos de ultraizquierda dentro del FA, que ya le vienen marcando la cancha desde antes incluso de su anuncio.
Un comentario a la pasada. Cuando Blanca Rodríguez dejó el periodismo para ingresar a la política, no faltó un dirigente del FA, o analista genérico que no dijera que era un gran aporte a la actividad. Con Oddone, no se ha escuchado a nadie en esa línea. Raro, ¿no?
Volviendo al tema central, uno de los argumentos que ha dado el execonomista del estudio Ferrere para justificar su cambio de postura es que hay que tranquilizar al mercado, y que quien debería enfrentar las consecuencias del plebiscito, no puede estar diciendo que se acaba el mundo si sale.
La realidad es que el mercado no parece haberse tranquilizado en nada tras sus palabras, ya que el dólar se fue al precio más alto en varios años. Algo agravado por una segunda frase explosiva que dijo Oddone. “No se puede decir que no habrá suba de impuestos”.
Todo uruguayo con al-go de experiencia vital sabe qué significa cuando un eventual ministro de Economía se anima a decir eso en campaña. Y es que la suba de impuestos es un hecho, pase lo que pase.
De hecho, ya lo había anunciado el propio Oddone en una entrevista con este diario cuando el gobierno actual anunció una rebaja impositiva. Afirmó en aquel entonces estar en contra, y que la misma conspiraba con algunas metas en materia de subsidios y ayudas sociales.
A esto hay que agregar el proyecto de reforma tributaria de segunda generación, anunciado por varios economistas del FA, rápidamente sepultado cuando comenzó la campaña electoral
Pasando raya acá lo que tenemos son varias dudas, y una gran certeza. Las dudas vienen por el lado de qué piensa realmente Oddone sobre el plebiscito de la seguridad social, y su capacidad de liderazgo político, ya que al parecer prefiere sepultar sus hasta ayer firmes convicciones, en aras de lograr apoyo político interno. Alguien que prefiere engañar a la gente, y no decirle la verdad por miedo al mercado, difícilmente puede ser un jerarca político de fuste.
La certeza, es que pase lo que pase, Oddone viene a aumentar los impuestos a los sectores productivos y medios de la sociedad uruguaya. Será para pagar el agujero del plebiscito, será para dejar contenta a la ultraizquierda, será para cumplir con sus ambiciones redistributivas. De lo que no hay duda es quién será el que pague por la fiesta: usted, estimado lector. Como siempre.