Esteban Vicente | Montevideo
@|Para un gobierno que recién comienza, enfrentarse a Dolores no es muy recomendable…
Cuando se trata de enfrentar a una dama, no se soluciona con paracetamol, que es lo que ocurre con la Estancia denominada María Dolores. Los 32 millones que el Estado -es decir nosotros, los ciudadanos de este país pagaremos en billetes de color verde- serían para que unos “colonos” trabajen la tierra.
No sabemos si se aplica aquello que decía la letra: “Es una chica muy guapa y amiga de hacer favores”... Tampoco lo del precio que representa un 25% de lo que se incrementaría el presupuesto quinquenal a consideración parlamentaria.
Y cuando se pretende investigar, el partido de gobierno -cultor de la “transparencia” cuando era oposición-, prefiere que la gente permanezca en la ignorancia sobre María Dolores…
Total, dirán con razón, esto pronto se olvidará, sobre todo si la prensa no insiste, como sí lo hacía cuando afectaba al gobierno anterior (opiniones sobre medidas por la pandemia, caso Astesiano, medidas por la sequía, sobre la seguridad, etc.).
Pero la Dolores no anda sola… En la capital hay una “Villa…” que antes hacía las veces de “Miguelete” o de “Punta Carretas”, en vez de para seres humanos, para animales.
Como tantas cosas que no tienen explicación, está bajo la administración municipal. Y si el gobierno municipal ha sido encabezado por una “heladera”, al decir de un connotado dirigente de ese partido -que era “licenciado”, pero que no lo era- no podía darse cuenta que algunos empleados cobraban unos pesos de más!!!
Es que es difícil, con decenas de cargos gerenciales otorgados por cupos partidarios dentro del FA, ¿quién controlaba a la Dolores?