Adiós al presidente Mujica

Emanuel Seropián | Montevideo
@|El país despide por estos días al expresidente José Mujica, quién ejerció el sexto mandato constitucional desde la restauración democrática y el cuadragésimo desde Rivera. Mujica fue, hasta su último aliento, el principal líder de la colectividad política más grande del país y en su figura se ven representados la mitad de mis compatriotas orientales. El último de los grandes líderes que le quedaba al Frente Amplio luego de que en los últimos años fallecieran el Dr. Vázquez y el Cr. Astori, por nombrar solo dos de las tantas figuras destacadas de dicha colectividad política. El Frente Amplio se ha quedado desde ahora sin un ex presidente vivo y ha perdido a todos sus líderes de envergadura.

Protagonista indiscutido de las últimas décadas del país, amado por muchos, criticado por el resto, pero nunca ignorado, fue un líder que, desde lo pragmático, no puede despertar otra cosa que no sea admiración. Su carisma, su capacidad de empatizar con la gente, su cercanía y sencillez le zanjaron un camino donde supo ser influencia para multitudes. Cosechó récords en materia electoral y alcanzó lugares que nadie hubiera previsto. Fundó y consolidó un movimiento político al cual deja hoy en su mayor esplendor: hoy el Frente Amplio cuenta con el MPP más poderoso de su historia. Abandona esta vida por el natural deterioro de la salud del cuerpo humano, pero todo lo que construyó goza de una salud ubérrima. Cumple a la perfección con lo que un líder debe asegurar: la continuidad de su proyecto en su ausencia. Y lo que no es menor: fue presidente y no se murió hasta dejar un presidente de su misma cuña.

Tales logros no pueden despertar otra cosa que no sea admiración, respeto, y la humildad de querer aprender de su ejemplo como conductor, a pesar de que son pocas las cosas en las que me pueda ver identificado en su pensamiento, y mucho menos aún, en sus acciones.

Mi más sentido pésame a mis compatriotas que hoy lo despiden con dolor, pero con el alivio de que, en ellos, sigue vivo.