Desmantelan al comando más combativo de ETA

BILBAO | EL PAÍS DE MADRID

ETA sufrió ayer un duro golpe cuando la policía desmanteló al comando "Vizcaya", considerado el grupo "más activo y dinámico" de la banda separatista armada vasca desde el final de la tregua con el gobierno el año pasado.

Entre los nueve detenidos figura Arkaitz Goikoetxea Basabe, jefe del grupo que ha sostenido la actividad de la organización terrorista desde mediados de 2007, cuando los terroristas, entre ellos Goikoetxea, volaron el cuartel del instituto armado en Durango.

Era el primer atentado con éxito tras la cadena de fallos de los comandos etarras desde que ETA dio por terminado el alto el fuego permanente, el 6 de junio de 2007. La Guardia Civil, con los arrestos efectuados ayer en Vizcaya (siete), Pontevedra (uno) y Málaga (una), ha neutralizado el grueso del grupo que mantenía en jaque a todas las policías. Y lo que es más importante, el instituto armado se anticipó a la campaña de atentados de verano que el grupo había puesto en marcha dos días antes con la colocación de cuatro bombas en dos localidades de Cantabria.

Esos atentados, las pesquisas tras el atentado de la casa cuartel de Legutiano (donde murió un policía), junto a los minuciosos seguimientos efectuados en los últimos meses por los miembros del Servicio de Información de la Comandancia de Vizcaya, han dado como resultado la pérdida para la organización armada de su grupo más dañino.

El presunto jefe del comando Vizcaya de ETA tenía en su poder material para activar una nueva campaña de atentados, según fuentes de la investigación. Los agentes del instituto armado, que actuaron bajo la dirección "in situ" del juez de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón, hallaron en el domicilio de Bilbao donde fue detenido Arkaitz una mochila con cinco mapas de ciudades andaluzas, de Lisboa y de la Costa del Sol -sin anotaciones-, dinero preparado en sobres para ser repartido, y un detonador eléctrico que no estaba aún preparado para hacer explosión.

Los investigadores sospechan que parte de este material debía ser entregado próximamente a otros terroristas para mantener la actividad de la banda fuera del País Vasco. De hecho, salvo en el caso de los dos guardias civiles asesinados en Capbreton (Francia), el grupo desarticulado ayer estaba detrás de los principales atentados de ETA. Sólo quedaría fuera el asesinato del ex edil socialista de Mondragón (Guipúzcoa), Isaías Carrasco, obra de un pistolero liberado de ETA no relacionado con el grupo desarticulado.

Tanto la Ertzaintza (policía vasca), como el resto de Fuerzas de Seguridad desvincularon desde el principio de ese asesinato al grupo Vizcaya.

Recambio. Junto al jefe del grupo, en palabras del ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, la Guardia Civil detuvo en el domicilio donde apresó a Goikoetxea, situado en la bilbaína calle Iturribide, a Maialen Zuazo Aurrekoetxe y Ana Isabel Prieto Furundarena, ambas de 25 años. En Elorrio, localidad que ha sido peinada durante meses por la Guardia Civil, arrestaron a Adur Aristegui Aragón, de 24 años; y a Gaizka Jareño Ugarriza, de 25. Este último tenía en su poder dos pistolas. En el municipio de Getxo, uno de los escenarios preferidos del Vizcaya para sus atentados y los golpes de la kale borroka (lucha callejera), los agentes detuvieron a Íñigo Gutiérrez Carrillo, de 25, Mikel Saratxo Moro, de 23. Los dos últimos detenidos son Libe Aguirre Mazaga, de 33 años y natural de Elorrio, arrestada en Fuengirola (Málaga) y Aitor Cotano Sinde, bilbaíno de 24 años, apresado en Nigrán (Pontevedra). Este último es sobrino del cónsul honorario de Dinamarca en Vigo, José Antonio de Román y Luis, según adelantó la agencia EFE.

Las edades de los arrestados -la mayoría de ellos por debajo de 26 años- vendrían a probar una de las sospechas policiales: que ya se ha producido un relevo generacional en ETA, tanto en su estructura de comandos, como en el Zuba (comité Ejecutivo), descabezado con la detención de Francisco Javier López Peña, Thierry, el pasado 20 de mayo en Burdeos, Francia.

"No podemos asegurar que se trate del único comando operativo de ETA, pero sí que era el más activo, el más dinámico y el más buscado" afirmó el ministro Rubalcaba tras el nuevo éxito policial contra ETA, alabado por partidos y por la consejería vasca de Interior, que dirige Javier Balza.

El Ministerio del Interior relaciona directamente a Arkaitz Goikoetxea con cinco atentados: contra la casas cuartel de Durango, el fatal de Legutiano y de Calahorra contra la comisaría de la Ertzaintza en Zarauz y la bomba trampa contra la policía vasca en los juzgados de Getxo.

El domingo 20 de julio, ETA hizo estallar varias bombas de escasa intensidad cerca de las playas de Cantabria, zona turística española. No hubo heridos.

El martes 14 de mayo murió un guardia civil de 41 años y otros cuatro resultaron heridos por la explosión de una furgoneta bomba de ETA, ocurrida en la madrugada contra la casa cuartel de la Guardia Civil en la localidad alavesa de Legutiano, a 17 km de Vitoria.

El viernes 7 de marzo, Isaías Carrasco, ex consejal socialista de la localidad de Mondragón (Guipúzcoa) falleció tras ser tiroteado en el portal de su casa, en presencia de su esposa y su hija. Los disparos fueron efectuados por una sola persona.

En los últimos ataques del grupo en 2007, el 1° de diciembre, tras un encuentro fortuito entre los agentes de la Guardia Civil y los etarras en una cafetería de un centro comercial en Landas (sur de Francia), muere un policía y otro, gravemente herido, fallece a los días.

El 24 de agosto de 2007 se produjo el primer atentado desde el alto al fuego anunciado en junio, con la explosión de una furgoneta frente al cuartel de la Guardia Civil en Vizcaya, con el saldo de varios heridos leves.

La pista de los "cabecillas" del comando Vizcaya, Arkaitz Goikoetxea y Jurdan Martitegi, estuvo "caliente" en agosto y noviembre de 2007, pero después no se los volvió a ver. En agosto, las huellas de uno y el ADN de otro permitieron responsabilizarlos por los atentados de Durango. Su pista reapareció el 11 de noviembre, a raíz de otro atentado fallido contra la Ertzaintza mediante dos bombas en el Palacio de Justicia.