CARACAS
Decenas de opositores venezolanos protestaron ayer en el este de Caracas contra las intervenciones de tierras ociosas por parte del gobierno.
Chávez realizó ayer su programa dominical "Aló Presidente" desde la finca "La Marqueseña", una de las más grandes del país y que fue tomada militarmente por órdenes del Instituto Nacional de Tierras (INTI) tras declararla "territorio baldío de la Nación".
El mandatario anunció un proyecto para desarrollar esas tierras de poco más de 8.400 hectáreas y planteó a los dueños de la propiedad, la familia Azpurua, dividir en tres la propiedad. El mandatario ofreció a Azpurua dejarle 1.500 hectáreas, mientras que 2.700 hectáreas serán entregadas a campesinos para trabajar la tierra y en las restantes se instalará una empresa estatal de mejoramiento genético del ganado.
Chávez aseguró que le ha declarado la guerra al latifundio en su país.
Carlos Azpurua se ha negado a abandonar la finca tras denunciar la "violación" a su derecho a la propiedad privada y aseguró que concurría a una instancia judicial para recuperar la estancia.
Un ley de 2001 autoriza al estado a expropiar las tierras que considere ociosas.