Sofía Diamante/La Nación/GDA
El presidente Luis Lacalle Pou aterrizó en Bariloche minutos antes del mediodía en un vuelo privado con los empresarios argentinos radicados en Uruguay, con los que tiene buena relación. Sonriente, salió por la puerta de arribos internacionales del aeropuerto vestido de manera informal, con championes, pantalón cargo y campera azul, pero con la funda del traje en la mano. Dos turistas lo reconocieron y él se acercó a saludar, mientras la comitiva de empresarios lo esperaba en la puerta del aeropuerto.
El mandatario uruguayo fue la gran atracción del primer día del foro Llao Llao, el exclusivo encuentro que se realiza una vez al año en la provincia de Río Negro, y el primero de los tres presidentes que estarán presentes en esta edición, junto con el argentino, Javier Milei, y el paraguayo, Santiago Peña.
El evento lleva el nombre de un lujoso hotel de San Carlos de Bariloche, de la provincia de Río Negro. El edificio es propiedad de los empresarios Eduardo Elsztain (Grupo IRSA) y David Sutton (Grupo Alvear).
Lacalle Pou viajó en el avión privado de Carlos Miguens, accionista de las empresas San Miguel, Central Puerto y Patagonia Gold. También formaban parte de la tripulación Marcos Galperin (Mercado Libre), Martín Migoya y Guibert Englebienne (Globant), Matías Woloski (Auth0), Gastón Taratuta (Grupo Aleph), Juan Manuel Collado (Grupo Tapebicuá) y Sebastián Serrano (Ripio).
Por la noche, pasadas las 21, Lacalle Pou entró al salón principal del hotel –donde se sirve el desayuno– para exponer frente a los 120 dueños de empresas, que estaban expectantes, en un cocktail descontracturado, cerrado a la prensa, donde había empanadas de trucha y caprese y unos finger foods de cordero. Lacalle Pou prefirió el bajo perfil y evitó hablar con los periodistas, pese al pedido de los medios.
“Como todos los años, es costumbre desde la organización convocar a las reuniones de todos los participantes bajo la regla de Chatham House, para permitir conversaciones que enaltezcan la dinámica”, advirtieron en el foro. Esto significa que los participantes pueden hablar de lo conversado, pero no pueden detallar quién dijo cada cosa.
El nombre proviene de la sede del Real Instituto de Asuntos Internacionales de Londres, también conocido como Chatham House, donde surgió la regla en junio de 1927.
El mandatario uruguayo volverá al país la semana próxima para participar de la cena de Fundación Libertad, junto con el presidente Javier Milei, la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, y el expresidente Mauricio Macri.