Piso Flotante: una opción interesante

El parqué flotante está dejando atrás otros materiales como la baldosa, la cerámica y componentes nobles como la tarima y el parqué pegado. ¿ A qué se debe su demanda? ¿Cuáles son sus características?

Se trata de piezas (generalmente láminas alargadas de madera que han sido pegadas y barnizadas. Estos pavimentos de madera no se pegan ni clavan al suelo, sino que la cara que no se ve, la que no se pisa y queda por debajo, se apoya sobre una membrana o copa de neopreno (puede ser un soporte de gomaespuma o similar). Por tanto, queda flotando al mismo tiempo que actúa de aislante. Su principal ventaja respecto a otros tipos de entarimado radica en que no precisa de grandes obras para su colocación, ni siquiera hay que vaciar completamente la vivienda para instalarlo. Además, se puede usar sobre cualquier tipo de superficie, incluso encima de un pavimento anterior, siempre que esté plano. El único cuidado que precisa es una temperatura ambiente de 20 grados y una buena ventilación en el ambiente para evitar que el vapor de la humedad caiga sobre la superficie y se convierta en líquido. Su colocación incrementa la altura del suelo alrededor de tres o cuatro centímetros, por lo que si se monta sin quitar el anterior pavimento, las zonas o ambientes en los que no se instale pueden quedar más bajas. Aunque el neopreno sobre el que se colocan las láminas de madera actúa como aislante, se aconseja no instalar este tipo de parqué en las partes de la vivienda en las que se aprecie mucha humedad, dado que el agua y la madera son incompatibles. Por lo tanto no se recomienda para baños y cocinas.

Entre las ventajas figura:

1) Resistencia al desgaste y deterioro.

2) La luz solar no come su color original y resulta difícil de arañar.

3) Alto nivel de absorción y aislamiento de ruidos, superior a otros suelos.

4) Se coloca en tres días a lo sumo, sin necesidad de que los habitantes abandonen la casa.

Madera con distintos colores.

Hay dos tipos de flotantes: de madera natural y recubierto con resina de melamina. La diferencia radica en que este último ofrece más opciones, pues se pueden elegir de colores diferentes, mientras que el primero no admite variaciones y se limita al color de la madera elegida.

Cómo cuidar el piso flotante.

Se recomienda pasar la aspiradora, pues así se recogen las partículas de suciedad sin arrastrarlas, evitando el efecto lija. Se puede limpiar con un trapo humedecido en un producto líquido específico para este tipo de superficie. Algunos recomiendan la mezcla de agua y vinagre.

Atención para no rayar el suelo.

Hay que recordar que se debe evitar el exceso de agua en su mantenimiento. Para evitar un posible rayado es aconsejable poner tacos de fieltro en las patas de las sillas y mesas ratonas. No conviene arrastrar muebles ni pisar el suelo con barro o arena en la suela de los zapatos