Objeción a jerarcas por autofijarse sus salarios

El Tribunal de Cuentas de la República (TCR) objetó a los tres directores y al síndico de la Distribuidora Uruguaya de Combustibles Sociedad Anónima (Ducsa) por haberse fijado sus propios sueldos y "partidas extraordinarias", cuando las normas vigentes determinan que esa potestad corresponde a la empresa Ancap, de la cual dependen.

En el segundo semestre del año pasado, el presidente del directorio cobró tres partidas "extraordinarias", y los otros dos directores y el síndico recibieron dos cada uno, por una suma total de 8.938 dólares y 95.513 pesos.

Si bien durante el primer semestre de 2001, cuando Ducsa fue creada por Ancap, se determinó que los directores serían honorarios, el reglamento fue cambiado pocos meses después, y los jerarcas comenzaron a cobrar sueldos. Sin embargo, el artículo 748 de la ley 16.736 —presupuesto quinquenal— estableció que los sueldos, viáticos y otras retribuciones de los directores de las sociedades anónimas con participación estatal, deberán ser fijados por la entidad pública a la cual representen.

Ese mismo artículo fue citado por el TCR en una resolución que adoptó en su sesión del miércoles pasado, y por la cual objetó la fijación de esos salarios y partidas.

En el documento del Tribunal, se indica que el directorio de Ancap mandató a su representante en Ducsa "la determinación de la remuneración de los señores directores y síndico" de la empresa, y se advierte que esa "potestad no es delegable sin norma legal expresa".

Los directores y el síndico de Ducsa son cargos políticos. Ducsa se encarga de la logística de distribución de combustibles desde Ancap, y su capital accionario está integrado en un 1 por ciento por la Corporación Nacional para el Desarrollo y en un 99 por ciento por Ancap.

MILLONES. Durante el 2002, Ducsa gastó 3.274.400 pesos en los sueldos y partidas de sus tres directores y su síndico, según datos del TCR a los cuales accedió El País. Hasta junio, mes en que el peso uruguayo se devaluó fuertemente, el presidente del directorio, Carlos Matyzcyk, cobró un sueldo líquido de 3.500 dólares, y desde ese mes hasta diciembre percibió 60.025 pesos mensuales. Por su parte, en el primer semestre los dos directores, Augusto Montesdeoca y Juan José Cornes, y el síndico, Oscar Perdomo, cobraron 2.500 dólares. En el segundo semestre, sus salarios fueron de 42.875 pesos, todo en términos líquidos.

Asimismo, el presidente del directorio percibió una "partida única extraordinaria" de 3.522 dólares, que cobró el 16 de setiembre de 2002, y otras dos "partidas extraordinarias" por 2.917 dólares en junio y 28.781 pesos en diciembre del mismo año.

Los directores cobraron "partidas extraordinarias" de 833 dólares cada uno en junio; también recibieron, por el mismo concepto, 21.437 pesos Montesdeoca y 23.858 pesos Cornes en diciembre. A esos montos se les sumaron las cargas sociales correspondientes.

El síndico Perdomo cobró las mismas partidas que Montesdeoca, según la resolución del Tribunal de Cuentas, a la cual accedió El País.