Mil alumnos de las escuelas 29 y 30 (Checoslovaquia) del Cerro están dispersos en una decena de salones del barrio desde que el edificio fuera clausurado por riesgo de desprendimiento de revoque a principios de mes. Por el momento trabajan solo tres obreros en medio horario y de forma intermitente, para reparar un edificio de 151 años, con 20 salones y problemas edilicios de extrema gravedad, según un arquitecto de la ANEP.
Los locales alternativos, distantes hasta 14 cuadras entre sí, fueron gestionados por los padres, quienes realizaron la mudanza, reparten la leche y se hacen cargo de los gastos de funcionamiento y de limpieza.
"Cuando aceptamos que los cursos se desarrollaran en locales alternativos, no fue para permitir que Primaria extendiera sus obras en el tiempo", señaló Leonardo Méndez, uno de los padres afectados que esta semana concurrió junto a otros padres a la Comisión de Educación de Diputados para reclamar esta situación.
La semana pasada, Méndez fue al Consejo de Educación Inicial y Primaria (CEIP) para denunciar la forma irregular en que funcionan las escuelas. No lo recibieron, esperó dos horas en la entrada, y cuando bajó una de las consejeras, Irupé Buzzetti, le prometió que la empresa constructora retomaría el trabajo la semana siguiente. Pero eso no ocurrió.
Los padres también plantearon a Primaria la posibilidad de hacer un contrato de voluntariado con una ONG, que estaba dispuesta a hacer una tirada de revoques, pero se lo negaron.
Hoy se dictan clases de hasta 70 alumnos en pequeños salones, algunos sin mobiliario suficiente; las directoras deben recorrer los locales a pie, y algunos padres reparten a sus hijos por hasta cinco locales diferentes.
Los padres denuncian la "actitud defensiva" que tuvo el CEIP, que en la resolución de clausura del local le atribuyó al Codicen la responsabilidad del mantenimiento del edificio y la realización de obras mayores. El propio presidente del CEIP, Óscar Gómez, denunció en La República que el Codicen demoró en dar una respuesta al problema.
"Fuimos al Consejo de Primaria y nos dijeron: `Yo no tengo nada que ver`. Esto fue lo que recibimos como respuesta", dijo Méndez.
Reclamo. Luego de la visita de los padres al Parlamento, los diputados nacionalistas Jaime Trobo, Daniel Mañana y José Carlos Cardoso realizaron un planteo formal al Consejo Directivo Central (Codicen) de la Administración Nacional de Educación Pública (ANEP) para que "disponga la utilización de los mecanismos de excepción incluidos en el Tocaf para los casos de urgencia, a fin de poner en condiciones de adecuado funcionamiento el local en que funcionan las Escuelas 29 y 30".
Para los diputados, la situación causa "un grave daño" a la educación de los niños.