La Copa Intercontinental llega a su último capítulo

Yokohama (Japón) - El partido del domingo entre el Once Caldas y el Porto bajará el telón de la Copa Intercontinental, la tradicional cita que desde 1960 ha servido para que los campeones de Sudamérica y Europa midan fuerzas a nivel de clubes.

Pase lo que pase en el Estadio Internacional de Yokohama, el saldo quedará favoreciendo irremediablemente a los sudamericanos, que se proclamaron campeones en 22 de las 42 ediciones que se han disputado frente a las 20 conquistas de los europeos.

El formato de un solo partido en Japón, donde la copa se ha jugado ininterrumpidamente desde 1981, dará paso a partir del año entrante a la Copa Mundial de clubes, un proyecto concebido por la FIFA.

Ya no habrá protagonismo único de conjuntos de Europa y Sudamérica, al abrirse las puertas a los representantes de las otras cuatro confederaciones: CONCACAF, Africa, Asia y Oceanía.

Por el momento lo que no cambia es la sede, ya que Japón seguirá siendo anfitrión al menos en los primeros dos torneos.

El tenor de despedida que rodea al choque del domingo ofrece un enfrentamiento entre equipos de Colombia y Portugal sin luminarias en sus filas y que este año derribaron de su pedestal a rivales de amplia trayectoria.

El Once Caldas se convirtió en apenas el segundo equipo de Colombia en adjudicarse la Copa Libertadores tras vencer en la final a Boca Juniors de Argentina, el campeón reinante de ese torneo y que se alzó con su tercera Intercontinental del año pasado.

Porto, a su vez, fue la revelación de la Liga de Campeones, aprovechando los reveses de pesos pesados como el Real Madrid, Milan y Manchester United, que ni siquiera alcanzaron las semifinales.

Colombia todavía no ha disfrutado una consagración en la Intercontinental y tiene en el Once su última opción para sumarse a Argentina (nueve títulos), Brasil, Uruguay (ambos con seis) y Paraguay (un título) dentro del grupo de países de Sudamérica que se consagraron.

La única otra ocasión que tuvo Colombia para levantar la copa fue en 1989, cuando el Atlético Nacional de Medellín, entonces dirigido por Francisco Maturana, perdió 1-0 ante el Milan de Arrigo Sacchi.

"Es una tremenda responsabilidad para nuestro club y para Colombia", declaró el técnico del Once Luis Fernando Montoya, reconociendo los orígenes modestos de su equipo. "Queremos llevarnos el trofeo a Colombia para demostrar que con poca plata se puede hacer mucho".

El equipo tiene su sede en Manizales, una ciudad que no llega al medio millón de habitantes y está enclavada en la zona productora cafetera de Colombia. Con tan sólo un título nacional en su haber, el Once recién debutó en la Libertadores de 1998.

Portugal tiene un título y ese pertenece precisamente al Porto, que se proclamó campeón en 1987 al vencer al Peñarol uruguayo por 2-1 en un alargue.

Porto viene entonado tras haber sorteado la primera ronda de la Liga de Campeones, al ganarle 2-1 al Chelsea el martes gracias a un gol de su delantero sudafricano Benny McCarthy a cuatro minutos del final.

AP