Santiago de Chile - El jubilado juez chileno Juan Guzmán, quien arrestó y procesó a Augusto Pinochet, afirmó hoy que el Poder Judicial contribuyó a la represión dictatorial en Chile mediante el rechazo de más de 10.000 recursos de amparo.
En una reunión con la prensa en un café de Santiago, Guzmán adelantó algunas partes de su libro "En el borde del mundo: Memorias del juez que procesó a Pinochet" , que la editorial Anagrama publicará el 22 de junio en Chile y el 27 del mismo mes en España. El magistrado, que llegó a investigar más de 200 querellas contra Pinochet, se explayó sobre su relación con el ex gobernante de facto (1973-1990) y reiteró que fue presionado por algunos de sus pares, pero aseguró que tiene piel de elefante y no guarda rencores con nadie.
"El Poder Judicial rechazó (durante la dictadura) más de 10.000 recursos de amparo. Con ese rechazo se colaboró a que continuara la represión en su forma más violenta" , afirmó. A su juicio, hubo un círculo de responsabilidades en las violaciones de los derechos humanos, que abarcó al mando administrativo del país, a los jefes castrenses y sus subalternos y también al Poder Judicial.
Guzmán, que se jubiló el pasado 4 de mayo, también reveló que no le abrió prontuario a Pinochet, lo que fue criticado en su oportunidad por las víctimas, por "razones humanitarias" . Explicó que Pinochet siempre fue cortés con él, "pero arrogante" y descartó calificarlo, porque su opinión sobre el ex dictador está en sus dictámenes. Agregó que en los dos interrogatorios que le hizo no sintió que el nonagenario militar lo estuviera engañando respecto de su salud, aunque consideró que en esas ocasiones hubo "excelentes puestas en escena" de parte de terceros.
El retirado juez sorprendió cuando en julio de 2001 despojó de su fuero, procesó y arrestó a Pinochet por 75 crímenes de la caravana de la muerte , comitiva militar que en 1973 ejecutó sin juicio a presos políticos. El caso fue archivado en julio de 2002 por la Corte Suprema, que consideró que una demencia vascular incapacitaba al general para comparecer en un proceso.
Sin embargo, Guzmán volvió a procesarle el 13 de diciembre pasado, como autor de nueve secuestros y un homicidio en el marco de la Operación Cóndor. Tras varia apelaciones, finalmente la Corte de Apelaciones absolvió a Pinochet, por razones de salud, el pasado 7 de junio y el caso será visto en definitiva por la Corte Suprema.
Juan Guzmán dijo a los periodistas que nunca se ha sentido frustrado por fallos adversos y que quizás su única frustración "es haber debido, querido y podido hacer más" . También descartó que su trabajo y el de otros jueces en casos de derechos humanos se esté desmoronando a raíz de fallos que en las últimas semanas han aplicado la ley de amnistía. "No se está borrando nada, cada juez es autónomo" , indicó y se mostró confiado en que la mayoría del poder judicial chileno seguirá el camino de la justicia.
En otro plano, Guzmán reiteró que tras su trabajo en los últimos años se siente políticamente más cercano a la izquierda y reveló que ha sido invitado a participar en la vida política, incluso con una oferta para una candidatura presidencial, lo que descartó de plano pues su vocación es la academia.
En cuanto a su legado, manifestó que quisiera enseñarle a las nuevas generaciones de abogados "cómo un juez mediante una investigación eficaz, finalmente puede llegar a todas las verdades, con paciencia, tenacidad y amor" . "Estoy pretendiendo mostrar lo que no debe ocurrir nunca más el país. Ese es el legado que quiero dejar" , subrayó.
En el terreno internacional, Guzmán destacó que la actuación del juez español Baltasar Garzón, la propia y la de muchos jueces chilenos, así como de Francia, Bélgica, Argentina y otros países, cambiaron el derecho universal. "Todos están colaborando hacia la realización de la justicia universal, que se refiere a que la violación de los derechos humanos es de competencia de todos los países del mundo" , subrayó.
Guzmán anunció que viajará a España para reunirse con el juez Baltasar Garzón, presentar su libro el 27 de este mes y ofrecer una conferencia sobre la tortura.
EFE