Hace apenas algunos días, durante el Consejo de Ministros que tuvo lugar en Dolores, el presidente Tabaré Vázquez fue interpelado por un vecino acerca del futuro del Grupo Gloria, que desde el 2014 viene denunciando que su operación en Uruguay es fuertemente deficitaria y que antes que asumiera la actual administración anunció su determinación de abandonar el país.

La respuesta de Vázquez no se hizo esperar. El primer mandatario sostuvo que la actitud de la empresa constituye "una falta de respeto" porque el Grupo Gloria "dijo que se iba por baja rentabilidad" de su negocio, "pero no lo ha hecho". "Creemos que esa planta tiene que trabajar. Está en una zona óptima", agregó.

"Una de las directivas que hemos dado es que las empresas privadas que vengan a invertir en el país sean investigadas, de tal forma que demuestren la seriedad de la inversión que van a hacer. Porque estamos viendo algunos casos, mínimos pero existen, de una actitud desaprensiva de inversiones que vienen y no cumplen, o que intentan no cumplir con los contratos que han firmado. Y Uruguay es un país serio, es un país responsable. Por lo tanto tenemos derecho a exigir a las empresas que lleguen al país a invertir que sean serias, que sean responsables y que cumplan con sus compromisos", dijo el presidente.

Veamos. ¿De qué habla Vázquez? ¿De quiénes? ¿Hay inversores que han llegado al país y que no están cumpliendo con los compromisos asumidos? ¿Cuáles son, señor presidente? Y lo más importante, ¿qué está haciendo el gobierno para llamarles a responsabilidad?

¿Es el caso del Grupo Gloria? ¿Tiene dudas el gobierno acerca de las razones por las que el Grupo Gloria se propone abandonar el país? ¿No es por baja rentabilidad de sus operaciones? Entonces, ¿por qué es?

Cuando el Grupo Gloria llegó a invertir al país, la izquierda que ya estaba en el gobierno les recibió con la alfombra roja. ¿Se equivocó aquel gobierno del Frente Amplio, al no "investigar" las "intenciones" con la que este grupo llegaba a invertir a Uruguay?

Y si el Grupo Gloria decidiera marcharse porque su operación, como firma, "no es rentable", ¿qué sería lo que debería condenarse? ¿Acaso se espera que una empresa privada mantenga un negocio que da pérdidas? ¿De verdad creemos que porque el Estado uruguayo lo hace, es esa la forma de manejar las cosas?

¿Cuántos inversores están viendo hoy que las operaciones por las que apostaron están dejando o han dejado ya de ser rentables? ¿Cuántos vienen denunciando falta de rentabilidad y condiciones que les impiden competir en el exterior? ¿Cuántos soportan altos costos y, a la vez, la irracionalidad de dirigentes sindicales que solo saben pedir más?

¿Cuántos "Grupo Gloria", que llegaron a Uruguay, están pensando en marcharse? ¿Cuántos están haciendo cuentas, en este mismo momento, para establecer cuánto tiempo más pueden soportar en estas condiciones?

¿Fue para ellos este mensaje del presidente? ¿O fue un aviso a los que piensen en venir? Y en ese caso, ¿cuál fue el mensaje? ¿Que al que viene a invertir se le pone la alfombra roja, pero que el día que se vaya lo vamos a poner bajo sospecha?

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La Columna de Pepe preguntón