Por tercera vez en el año, el Banco Central divulgó un comunicado que advierte sobre falsificaciones de billetes. En este caso de $ 1.000.
El Centro de Prevención y Análisis de Falsificaciones del Departamento del Tesoro del BCU dio a conocer la forma de reconocer los billetes apócrifos, a través de la lectura de tres elementos de seguridad contenidos en el papel moneda: la marca de agua, la imagen latente y la reacción ultravioleta.
En los billetes falsos, la imagen de la marca de agua -el rostro de Juana de Ibarbourou- aparece con la cara más alargada que en el original y con los rasgos menos marcados. Además, la palabra "mil" no está bien definida.
Por otra parte, en la imagen latente -dentro del sello plateado que se encuentra arriba a la derecha en el frente del billete, "no se observa la sigla BCU, ni la efigie de Artigas ni el valor 1000", detalla el comunicado de la autoridad monetaria.
Al someter un billete falso a un aparato de luz ultravioleta -cuyo uso está cada vez más extendido en comercios, locales de cobranza y casas de cambio- hay varios detalles a tener en cuenta, según el comunicado del Banco Central.
Por un lado, no reaccionan "ninguna de las dos numeraciones ni la espiga" que debe verse sobre el anverso de la imagen latente.
Por otra parte, al dar vuelta al billete, en el reverso no se observa ningún tipo de reacción a la luz ultravioleta.
En los últimos meses la autoridad monetaria ha alertado a los comerciantes y al público sobre la aparición de billetes falsos de distintas denominaciones: $ 200, $ 500 y, en este caso, $ 1.000.