Redacción El País
Cuando se aproximan reuniones o celebraciones, muchas personas se preguntan cómo evitar la temida resaca, ese malestar que aparece cuando el alcohol abandona el organismo y el cuerpo intenta volver a su equilibrio natural. Según Mayo Clinic, los síntomas —dolor de cabeza, náuseas, sequedad y cansancio extremo— suelen manifestarse cuando el nivel de alcohol en sangre baja casi a cero.
Aunque el consumo excesivo de alcohol siempre acarrea riesgos, una buena estrategia para mitigar sus efectos es hidratarse y alimentarse bien antes de brindar. Estas medidas ayudan a que la absorción del alcohol sea más lenta y menos agresiva para el organismo.
Qué comer antes de beber para reducir el impacto del alcohol
Si ya sabe que va a tomar, preparar el cuerpo con alimentos adecuados puede marcar una gran diferencia. Comer antes de beber reduce la velocidad con la que el alcohol pasa al torrente sanguíneo, algo clave para evitar un malestar intenso al día siguiente.
- Frutos secos
Almendras, nueces y otros frutos secos son una excelente opción. Su aporte de fibras, proteínas y minerales esenciales —como magnesio, potasio y calcio— ayuda a equilibrar los niveles electrolíticos que se alteran con el alcohol.
- Proteínas
Alimentos como pollo, huevos, cerdo o salmón aportan proteínas y grasas saludables que favorecen una digestión más lenta. Eso hace que el alcohol se absorba de manera más gradual.
- Yogur griego y lácteos
Crean una especie de barrera protectora en el estómago. Gracias a sus proteínas y carbohidratos, ralentizan el paso del alcohol hacia la sangre y evitan irritaciones.
- Agua
Aunque no es un alimento, la hidratación es fundamental antes, durante y después de beber. Ayuda a proteger el hígado y previene la deshidratación, una de las principales responsables de la resaca.
- Palta y frutas ricas en agua
El aguacate aporta grasas saludables, mientras que frutas como melón y sandía ayudan a mantener el cuerpo hidratado y con energía.
Qué comer al día siguiente para aliviar la resaca
Si a pesar de los cuidados aparece el malestar, hay alimentos y bebidas que pueden ayudar al organismo a recuperarse.
- Plátano o banana
Rico en potasio, repone las reservas que se pierden con la deshidratación y ayuda a equilibrar los electrolitos.
- Sopa de fideos o caldo
El clásico “caldito levanta muertos” vuelve a ser protagonista. Aporta sodio, rehidrata y reconforta el estómago, especialmente cuando hay náuseas o falta de apetito.
- Agua, jugo de tomate o té verde
Hidratarse sigue siendo clave. El jugo de tomate puede colaborar en la recuperación de glóbulos rojos y el té verde aporta antioxidantes.
- Café
Una taza de café puede ayudar a disminuir la inflamación y mejorar el estado de alerta, aunque conviene no excederse para evitar más deshidratación.
La clave: moderar el consumo
Más allá de cualquier consejo nutricional, la mejor forma de prevenir la resaca es medirse en la cantidad de alcohol que se consume. Un cuerpo bien alimentado, hidratado y descansado enfrentará mejor el impacto de la bebida, pero ningún alimento compensa un consumo excesivo.
En síntesis: comer proteínas, fibras, frutas ricas en agua y mantenerse hidratado puede reducir los riesgos; pero la verdadera prevención empieza siempre con una copa menos.
En base a El Tiempo/GDA