Frases que sabotean tu camino al éxito: cambiar el lenguaje también cambia tu mentalidad

Algunas expresiones cotidianas pueden limitar tu crecimiento sin que lo notes. Identificarlas y evitarlas es un primer paso para desarrollar una mentalidad más positiva y enfocada en el logro.

Cómo reconocer a una persona ingrata
Cómo reconocer a una persona ingrata
Foto: Freepik

Mariana Sierra Escobar/El Tiempo GDA
Hacer algo de forma satisfactoria, alcanzar reconocimiento u obtener resultados positivos en algún proyecto personal pueden ser señales de que está siendo una persona exitosa.

Si cumple con esas características, es probable que esté llevando un estilo de vida diferente al común denominador, es decir, que tenga ciertas acciones, comportamientos, expresiones y recursos que lo ayuden a mantenerse en una posición positiva.

De acuerdo con un artículo de opinión de la Universidad de Piura (Lima), para tener éxito es esencial partir de la motivación, ya que de esta mentalidad enérgica es que provienen las razones y la fuerza para conseguir los objetivos.

La mentalidad juega un rol clave en este proceso, pues tener proyección y una actitud de “empuje” hacen que haya un soporte o un peso que no desvíe la consecución de los objetivos.

El portal ‘Arista’ dice que más allá de alcanzar metas, una persona motivada “es capaz de transmitir energías positivas a su entorno, tener buenas relaciones interpersonales y de superar cualquier obstáculo”.

Si su interés es empezar un camino hacia el éxito y hacer un cambio de mentalidad progresivo, es importante que sepa cómo debe expresarse y qué palabras puede evitar para mantenerse más enfocado.

Estas pueden ser algunas de las frases que debe suprimir de su vocabulario:

“No soy lo suficientemente bueno”: este tipo de expresiones suelen crear limitaciones; en lugar de eso, es mejor enfocarse en sus virtudes.

“Eso no me corresponde”: las personas con ambición no se enfrascan en lo que siempre han hecho, sino en qué otra cosa pueden hacer para salir de su estado común y lograr lo que desean.

“No me va bien”: si usted quiere algo, tenga en cuenta que no es cuestión de suerte, sino de esfuerzo y trazarse metas.

“Es imposible”: ante el primer fracaso, no es opción rendirse. Lo ideal es buscar nuevas estrategias para que eso, que parece ser difícil, se pueda lograr.

“Eso se hace así”: en vez de tener en cuenta una sola forma de hacer las cosas, las personas exitosas exploran diferentes medios para actuar.

“Estoy demasiado ocupado para hacer algo más”: un día tiene 24 horas, y si bien es importante descansar o tener momentos de socialización, si desea algo, se busca el espacio para hacerlo.

Un cambio de mentalidad va acompañado de transformaciones en todo sentido. Para lograr lo que se quiere, a veces toca atravesar por situaciones que no se contemplaban, pero sobre todo, hacer sacrificios.

La recomendación es empezar por lo básico y declarar cosas grandes para usted, su equipo de trabajo y su entorno. Según el neurocientífico Mariano Sigman, para crear nuevas realidades hay que tener en cuenta “el poder de las palabras”.

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