Operaciones inmobiliarias se redujeron 16,9% a marzo

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La actividad inmobiliaria en el primer trimestre del año se vio resentida respecto a igual lapso de 2011 con menos transacciones concretadas por un monto inferior. Empero las compraventas que se realizaron fueron por valores más altos.

Los datos surgen de cálculos de El País en base a la recaudación del Impuesto a las Transmisiones Patrimoniales (ITP), por el cual la Dirección General Impositiva (DGI) tuvo ingresos entre enero y marzo por $ 320 millones, esto es, unos US$ 16,3 millones según datos preliminares. En igual período de 2011 la recaudación había sido de $ 322 millones, lo que implicó una variación interanual nominal de -0,7%, según datos de la Asesoría Económica de la dirección de Rentas.

El ITP grava -de acuerdo al artículo 2 de la ley 16.107- con el 2% al comprador y con otro 2% al vendedor del valor catastral del inmueble (no el de mercado) a las "enajenaciones de bienes inmuebles, de los derechos de usufructo, de nuda propiedad, uso y habitación" así como a "las promesas de las enajenaciones referidas en el literal anterior y las cesiones de dichas promesas", a las "cesiones de derechos hereditarios y las de derechos posesorios sobre bienes inmuebles", y a las "sentencias declarativas de prescripción adquisitiva de bienes inmuebles".

En este sentido, como el 4% de este tributo que cobra la DGI corresponde al valor de las operaciones inmobiliarias, puede concluirse que el total negociado por este concepto sumó $ 8.000 millones, o unos US$ 409,6 millones al tipo de cambio promedio del trimestre. En dólares la cifra es levemente inferior a la de 2011 en que sumaron US$ 410,8 millones aunque supera la de 2010 de US$ 370 millones. Aún así dista de los niveles alcanzados en el primer trimestre de 2009 en que las compraventas de inmuebles habrían sumado un monto equivalente a US$ 434 millones en base a los ingresos por ITP.

La disminución se vio también en cuanto a la cantidad de pagos u operaciones realizadas en donde en la comparación interanual la variación alcanzó a -16,9%, según datos de la DGI.

Entre los operadores la cifra no causa sorpresa ya que preveían una cierta suavización del crecimiento, especialmente de los negocios concretados por argentinos.

"En el mercado se percibe una baja de la actividad pero menor al 16,9%", dijo a El País el presidente de la Cámara Inmobiliaria del Uruguay, Gabriel Conde. Según el representante de los operadores, en la merma del primer trimestre incidieron "las medidas argentinas restringiendo la salida de divisas y los avances en la firma del tratado para el intercambio de datos que hizo que varios inversores tomaran cautela y pusieran las barbas en remojo antes de concretar un negocio".

Exceptuando la costa, donde se concretarían estos negocios, "a nivel del resto del país un factor que está incidiendo es la escasez de oferta de inmuebles tipo para los que hay más demanda de las propiedades que hay", afirmó Conde según planteos que han hecho agentes inmobiliarios de diversos departamentos. "Si a eso se le suma que el primer trimestre es el de menores ventas en el año, todo explica la baja", agregó.

Pero una caída en el nivel de actividad no se trasladó, no obstante, a nivel de precios, dijo el presidente de la gremial.

En los números esto se refleja en que pese a haberse producido una disminución en la cantidad de transacciones y en el monto movilizado, cada una de las compraventas que se concretó fue por un valor mayor dado que la baja en los volúmenes de dinero fue inferior a la de operaciones concretadas. Así, la variación nominal en el valor promedio de los pagos fue de 19,5%. Por esto dentro de la DGI consideran que si bien se dio una retracción en la recaudación debido a la cantidad de pagos, esto no fue a raíz del monto promedio de los mismos, que se mantuvieron en alza.

Además, dado que se trata del valor catastral y no del de mercado, es que el incremento en el valor de las transacciones promedio puede ser visto más como una mayor participación de operaciones por valores más altos en las transacciones promedio y no por un aumento generalizado en el valor de éstas.

En todo 2011 el total negociado en compraventas alcanzó los US$ 1.999,7 millones, en base a los registros de recaudación por el Impuesto a las Transmisiones Patrimoniales que obtuvo la DGI. La cifra mostró un incremento respecto a 2010 en donde el total movilizado fue de US$ 1.720 millones. Entre estos figura la venta de campos que incide por sus elevados montos de transacción.