Precio de la vivienda social tendrá tope de US$ 78.000

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Marcela Dobal

Las viviendas construidas con incentivos fiscales podrán tener un precio máximo de venta de hasta US$ 78.000 si son de dos dormitorios, según la zona geográfica. Privados ven limitantes en el interior del país donde el tope es de US$ 70.000.

La reglamentación de la ley de promoción de la vivienda social se conoció la semana pasada y ahora el Ministerio de Vivienda está por aprobar una resolución donde se fijan precios máximos de venta para lo que se construya, refaccione o amplíe con incentivos fiscales.

Para una vivienda de dos dormitorios, los topes equivaldrían a unos US$ 78.000 en Montevideo, Maldonado, Ciudad de la Costa y Colonia y unos US$ 70.000 en el resto del país, anunció la ministra de Vivienda, Graciela Muslera, quien expuso ayer en un desayuno de la Asociación de Dirigentes de Marketing junto al titular de Economía, Fernando Lorenzo, y el de la Agencia Nacional de Vivienda, Carlos Mendive.

Habrá tres áreas con precios máximos de venta. Algunas zonas de Montevideo tendrán topes (como la costera) idénticos a los de Ciudad de la Costa, Maldonado y Colonia. En el resto del Interior el tope será menor, según un borrador de la resolución a la que accedió El País (ver recuadro aparte).

Las viviendas promovidas podrán ser para la venta o alquiler. Deberán tener áreas habitables mínimas de hasta 50 metros cuadrados si son de un dormitorio, de hasta 69 metros si son de dos, hasta 88 metros si tienen tres y 107 metros si tienen cuatro. No se promoverán proyectos que involucren viviendas de temporada.

El presidente de la Cámara de la Construcción, José Ignacio Otegui, dijo que "probablemente en el Interior el proceso sea más lento". "Es donde tenemos alguna duda mayor que lo que hoy está arriba de la mesa pueda alcanzar para dinamizar la inversión en vivienda de interés social", dijo. Como restricción, señaló a los topes de precios, que "implican un cuello de botella para generar con los mismos costos viviendas a valores que no son reales".

"Si los ingresos en el Interior son menores, habrá que generar mejores políticas de apoyo a esas familias para que accedan a la vivienda y no suponer que por arte de gracia se van a bajar los costos en el Interior", añadió Otegui.

Muslera indicó que los topes "son necesarios". "Hay que buscarle la vuelta. El Interior tiene muchas posibilidades de inversión en lo que es reciclaje y ampliación y reforma", dijo.

El lunes, la ANV abrirá la "oficina del inversor" para recibir iniciativas de los privados, anunció Mendive. Otegui dijo que "ya hay proyectos adelantados". El déficit habitacional es de unas 65.300 viviendas y el cualitativo (residencias que necesitan refacción) suman cerca de 864.100 unidades, según el censo de 1996. La promoción busca elevar y mejorar el stock estimulando al sector privado. Exonera impuestos a proyectos de entre dos y 100 viviendas.