G. PÉRGOLA Y G. RODRÍGUEZ
Después de 12 horas, el dibujante Federico Heredia (25) terminó lo que se propuso: caricaturizar "en grande" a Diego Forlán. "Voy a esperar a que venga para pedirle perdón por cómo lo dibujé", bromeó Heredia cuando dio la última pincelada.
Cientos de planchas de cartulina, unidas con cinta adhesiva una con otra, completaron casi la totalidad del campo de juego del Estadio Centenario y formaron el "enorme lienzo" donde el dibujante Federico Heredia caricaturizó ayer -en un trabajo que le llevó 12 horas- la figura del mejor jugador del mundial de Sudáfrica, Diego Forlán.
Sobre las 20 horas, dio su última pincelada y culminó con un sueño que desde hace tiempo comenzó a pensar cómo hacerlo realidad. En diciembre de 2010, se acercó al propio Forlán y le propuso la idea.
"Preparé una caricatura y fui a esperarlo a Diego. Cuando bajó de su auto le entregué la caricatura y le comenté mi plan. Le dije que en 2011 me proponía dibujar la caricatura más grande del mundo y le pregunté si le parecía bien que lo dibujara a él. Habré hablado dos minutos, porque se tenía que ir. Lo que más me llamó la atención fue su humildad. Me dijo que me pusiera en contacto con su familia y que llevaran adelante la idea", contó Heredia, el joven dibujante de San Carlos, que ahora presentará al Guinness World Récords su trabajo, para quedarse con el récord de la "caricatura más grande del mundo".
PINCELADAS. El trabajo de Heredia comenzó sobre las 8:30 de la mañana de ayer. La primera tarea fue armar el "lienzo de cartulina". Una colocada al la-do de la otra, unida con cinta adhesiva, hasta completar el tamaño de la cancha. Concretamente, la hoja gigante tenía un tamaño de 105 metros de largo por 68 de ancho. A las 13 horas recién pudo comenzar a dar las primeras pincelas.
Al costado de la cancha, 60 latas de pintura estaban a disposición para ser usadas. De gorro de lana, jean, medias por encima del pantalón y remera de manga corta (a pesar de los pocos grados de temperatura) Heredia comenzó su trabajo.
"Qué locura este muchacho, ¡qué trabajo, por favor!", eran algunos de los comentarios que se repetía por parte de los espectadores, entre los que se encontraba la familia Forlán.
Recién a la hora 17 se abrieron las puertas de la Tribuna Olímpica y de a poco fue llegando gente, en su mayoría niños y adolescentes. En la cancha, Heredia apuraba cada pincelada, ya que la noche se le venía encima, mientras todos esperaban la aparición del caricaturizado futbolista.
"Está un poco engripado, pero claro que va a venir. A Diego le gustó mucho la idea y se comprometió con esto", dijo su padre, Pablo Forlán, que elogió el trabajo del joven.
SIN HABLAR NI COMER. "No puedo hablar ahora, me están filmando desde arriba y pueden pensar que me están pasando coordenadas o indicaciones", dijo a El País casi sin abrir la boca, cuando fue consultado referente al trabajo que realizaba. Es que en la tribuna Amsterdam, precisamente, una cámara puesta allí por el Guinness World Récords registraba cada segundo del trabajo de Heredia. Y, justamente, una de las condiciones que establecía el reglamento del Guinness era hacerlo completamente solo, sin ayuda, y sin descanso.
Durante seis horas, Heredia dibujo con brocha gorda la caricatura de su ídolo y no paró siquiera para tomar agua o comer. Quizás por eso, las primeras palabras que pronunció al terminar el trabajo fue "agua, por favor".
MISIÓN CUMPLIDA. Sobre las 20 horas Heredia terminó su obra, y los poco más de 50 espectadores que se mantenían en la tribuna Olímpica, pese al intenso frío, comenzaron a aplaudir y a vitorear su nombre.
"Me quedo contento con la intención, creo que pude haberlo hecho mejor. Pero me quedo contento con que me animé a hacerlo. Personalmente te motiva a seguir adelante" dijo el joven dibujante, después de beber agua.
Al ser consultado sobre qué lo motivó a realizar semejante trabajo Heredia respondió: "Es un lindo emprendimiento. Ha-ce unos meses averigüé quién tenía la caricatura más grande mundo, y me enteré que medía 12 por 29 metros y era de un dibujante de Singapur. Me lo propuse como desafió y no puedo creer que ya esté terminado", dijo alegre.
Luego de responder a la prensa, Federico fue felicitado por toda la familia Forlán que estuvo presente casi toda la tarde en el estadio. El hermano y representante de Diego, Pablo "boniato" Forlán lo felicitó con un chiste: "Lo menos... tendrías que dar una vuelta olímpica", lo que generó risas en los presentes. Sobre las 20:15, Diego Forlán llegó al Centenario. Ni bien pisó el campo, una nube de periodistas se abalanzó sobre el jugador.
"Vine a felicitar el trabajo de un artista, podría ser cualquier otro el que esté aquí. Lo que importa es el trabajo de Fede. Es algo muy lindo para él, que tiene la oportunidad de hacer una cosa de estas y en un estadio como el Centenario, con la historia que tiene. Espero que lo haya disfrutado", respondió el mejor jugador del mundial.
El trabajo ya está terminado. Ahora, el material de Heredia será enviado a las oficinas del Guinness, en Inglaterra, donde se verificará si, efectivamente, la caricatura gigante de Forlán (y este apellido) ocupará una página del Libro Guinness.
La cifra
35 fueron los litros de pintura acrílica (negra) que utilizó el joven dibujante para dejar pronta la caricatura gigante de Diego Forlán.