Nunca hay que decir nunca. En el mundo del rock, ese dicho ya debería figurar como una ley homologada por las máximas autoridades.
Son tantos los grupos que prometen que nunca más se juntarán en un estudio o en un escenario para luego hacer justamente eso que prometieron que no harían, que ya no hay credulidad que valga. El más reciente caso en una larga lista de ejemplos -Pink Floyd, Eagles, Deep Purple, Cream, Aerosmith, etc.- es el de Genesis.
En 1996, Phil Collins, la figura central del grupo luego de la partida de Peter Gabriel, había anunciado que ya estaba bien, que lo suyo iban a ser los musicales y las canciones para las películas de Disney. En ese entonces, hacía cuatro años que Genesis había realizado su última gira y Collins no quería salir a recorrer hoteles, aeropuertos, estadios y grandes teatros.
"¿Si aún me interesan las canciones de Genesis? No mucho, a decir verdad. Para ser completamente honesto, nunca fui un fanático de nuestra propia música. No tengo ninguna reverencia por nuestro material más antiguo, más allá de que nos divertimos mucho haciéndolo. Nunca sentí que logramos plasmar todo lo que imaginaba en los discos, particularmente en los primeros. Puedo imaginarme que los admiradores de Genesis me quieren linchar por decir esto, pero hay que ser honesto. De algunas cosas estoy muy orgulloso. De otras, bueno...puedo vivir sin ellas".
CAMBIO. Todo eso cambió ayer, cuando Collins, el guitarrista Mike Rutherford y el tecladista Tony Banks anunciaron en Londres una nueva gira, llamada Turn it on again (como la canción del disco Duke).
La idea inicial era reunir para la nueva gira a los integrantes que abandonaron el barco temprano: el guitarrista Steve Hackett y, por supuesto, Peter Gabriel, primer cantante y a quien Collins reemplazó en el micrófono.
Pero ni uno ni otro quisieron volver a formar parte de una banda que lleva vendido la friolera de 130 millones de discos en todo el mundo. Hackett ni se molestó en responder y Gabriel se limitó a un escueto comunicado: "Supe que Phil, Mike y Tony estaban ensayando para volver a tocar en vivo. Pero yo no formaré parte de ese proyecto. No descarto la posibilidad de volver a trabajar junto a ellos en el futuro. Sin embargo, por ahora prefiero seguir dedicándome a mis propias canciones y pensar en mi carrera".
Para acompañar el anuncio de la gira, el sello de la banda, EMI, decidió que sería interesante tratar de sacar provecho del interés de los millones de fanáticos. Por esa razón, la compañía decidió reeditar buena parte de la discografía del grupo -14 títulos en total- en formato "SuperAudio CD".
En la primera parte de la gira, Genesis se dedicará a recorrer varios países europeos como Alemania, Suiza, Inglaterra y Francia, entre otros. Para reforzar al trío, se sumarán a la gira dos ex-colaboradores tanto de Genesis como de Collins como solista: el guitarrista Daryl Steurmer y el baterista Chester Thompson.
Con la reunión de Collins, Rutherford y Banks vuelve la formación más exitosa de la banda, que a lo largo de los años ha cambiado numerosas veces de integración. Entre los que pasaron por Genesis está el cantante Ray Wilson, que hace un par de años visitó Montevideo para una presentación poco concurrida en el Plaza. Wilson fue quien reemplazó a Collins como cantante luego de que éste hiciera las declaraciones ya mencionadas en esta nota.
No hay planes de extender la gira luego del recorrido por Europa, pero es más que probable que la banda también recorra varios países del continente americano y asiático.
Plataforma
Además del éxito por cuenta propia, Genesis también fue una excelente plataforma para distintos proyectos de sus integrantes. No es necesario volver a recordar el tremendo éxito que tuvo Collins durante los ochenta, cuando editaba discos como In the air tonight y No jacket required. Pero el guitarrista Rutherford también tuvo una nada despreciable trayectoria con el grupo paralelo Mike & The Mechanics.