El Museo del Carnaval es un ente privado que cuenta con el apoyo del Ministerio de Educación y Cultura (MEC), del Ministerio de Turismo (MINTUR) y de la Intendencia de Montevideo (IM). “En sus inicios, fue el arquitecto Mariano Arana quién firmó una resolución, creando una primera comisión para evaluar la instalación del museo. Desde su proyección, siempre se visualizó en este terreno, que fue gestionado por Liliam Kechichian, cuando era directora de turismo de la Intendencia de Montevideo. Ella logró acordar con la ANP (Administración Nacional de Puertos) -a quien le pertenecía este terreno-, que lo cediera. Fue entonces, hace 18 años, que se armó una muestra inicial y a lo largo de los años el museo ha ido creciendo gracias al trabajo de muchas personas”, cuenta José Cozzo, quien se encarga de su gestión en representación del MEC, desde el año 2020.

Cozzo es asesor de la Subsecretaría del Ministerio de Educación y Cultura, y su trayectoria en el Carnaval se remonta al año 1987, cuando comenzó como juez durante la administración de Adela Reta, quien entonces presidía el Consejo Directivo del SODRE. Durante los siguientes años, integró el jurado del Carnaval y presidió la Comisión de Letras y las Llamadas, no solo en Montevideo, sino también en Colonia y Canelones. Además, ha escrito libros y se desempeña hace más de 30 años como docente en la Universidad Católica del Uruguay, sumando un aporte más ético y humanístico en la formación de los cursos y docentes. “No sé bien cómo explicarlo, pero cada vez que aparece algo vinculado al Carnaval, termino involucrado”, reflexiona entre risas.
Acerca del crecimiento de la institución que gestiona hasta este mes, explica que uno de los factores que impulsaron su expansión, y la de sus alrededores, se vincula directamente al turismo de cruceros. “Este tipo de turismo se viene consolidando en el país y mueve mucho público en la zona, en especial, en la cuadra en la que se enclava la institución. Es la misma del Mercado del Puerto, que de por sí es un fuerte punto de interés turístico. A su vez, todos los proyectos del museo que se orientan al turismo de cruceros, exigen una gestión de mediano aliento, ya que este público objetivo reserva sus paquetes de actividades con un año de anticipación, por lo menos. De ahí, que las propuestas que se iniciaron en los años anteriores, recién hoy están dando sus frutos”, comenta.
También pensando en el público visitante fue que se replanteó la totalidad del relato de la exposición permanente del museo. Esto incluyó audioguías en diferentes idiomas como portugués, francés e inglés, y en castellano, para lo cual Ana Ribeiro y María Inés Obaldía, prestaron sus voces. Asimismo, se estrenó un cortometraje dirigido por Federico Lemos subtitulado en portugués, inglés, francés y chino.

La experiencia que ofrece el lugar comienza con un espectáculo de bienvenida en la Sala del Museo. Esta sala cumple con estándares internacionales en sus instalaciones y es muy popular entre los montevideanos, atrayendo a artistas de todas partes del mundo con una grilla muy atractiva y variada. “Al principio de mi gestión, estábamos en pandemia, y ya en ese entonces trabajamos en un llamado a licitación que brindó una concesión para gestionar todos los espectáculos. Esto implica un ingreso directo y muy significativo para la sustentabilidad del museo. Esto permite contratar personal propio y realizar el mantenimiento edilicio necesario para operar de manera cada vez más profesional”.
Entre estas obras de mantenimiento se incluye la renovación de la mitad del techo. También se proyectó una zona de cafetería; se crearon dos baterías de baños para los visitantes; se reformó la Plaza del Carnaval del museo, así como los muros perimetrales y toda el área interna de oficinas. Además, se creó una tienda especializada donde artistas nacionales exhiben sus productos, contribuyendo a la difusión de este rico patrimonio cultural. Todo esto brinda una mejor infraestructura para las actividades de la institución y un impulso importantísimo para el desarrollo del Centro de Documentación.

Además de las reformas, el foco de la administración de Cozzo se centró en consolidar algunas actividades que se realizan desde el nacimiento del museo: talleres educativos con temáticas como los orígenes del carnaval y su evolución en Uruguay; la composición del coro de una murga, su marcha camión y la adaptación de ritmos musicales al sonido murguero; entre muchas otras. También, dio continuidad al proyecto llamado Tablado de Barrio, que procura recuperar la tradición de que los propios vecinos creen las escenografías, impulsando la vinculación de la comunidad con el museo. Este proyecto intenta replicar y mantener la manera en la que funcionaban los tablados populares de antaño, íntegramente gestionados por los vecinos. Este tablado funciona todos los fines de semana y tiene la particularidad de que cuando llueve, se traslada a la Sala del Museo, sin necesidad de interrumpir las funciones por mal tiempo.

Vale destacar que desde su apertura, la institución ha obtenido reconocimientos muy importantes como el Premio Internacional Reina Sofía de Conservación y Restauración del Patrimonio Cultural, en 2009, por su contribución a la preservación, recuperación y divulgación de la historia y tradición del Carnaval uruguayo. A su vez, en esta gestión saliente se alcanzó a inscribir parte del libreto del Carnaval de principios del siglo XX en el Programa Memoria del Mundo para América Latina y el Caribe de la UNESCO. Además se obtuvieron dos premios Iberarchivos. “Hoy tenemos un compromiso muy fuerte con la documentación e investigación, y por eso incorporamos una sala especial de investigación y un equipo humano muy capacitado con el fin de poder digitalizar nuestro acervo, que consta de 300 piezas de vestuario textil, además de trofeos y accesorios de utilería en metal, cuero, plástico y papel, así como documentos, de los cuales 50.000 ya fueron digitalizados. Este trabajo de archivo y conservación es algo que el público no ve, pero es indispensable para que el Museo pueda proyectarse y funcionar bien”.

Otro de los aspectos que se trabajó en estos años se vincula al impacto directo en el entorno del museo. “Por un lado, en la calle Maciel, que estaba un poco descuidada, se recuperaron las fachadas; se incluyó paisajismo con Santa Ritas, que poco a poco van a ir brindando un marco más cuidado al entorno. En lo que tiene que ver con la intervención artística, trabajamos los muros internos de la plaza con el mural Mujeres del Carnaval, pintado por mujeres artistas, con la intención de revalorizar su rol en esta fiesta. Seguimos con intervenciones en los muros perimetrales, donde se destaca la reinterpretación de tres soles -Escorpio, Sagitario y Virgo-, de Páez Vilaró, a cargo de Bruno Rosa, (@Berde14), y una mirada interpretativa de la vida del artista, creada por Verónica Gazzarata (@Min8). En su mural se puede ver al artista con una luna que simboliza la etapa que vivió cuando su hijo atravezó la tragedia de los Andes. También se destaca una pantera, que hace referencia a una anécdota de su historia que evoca cuando el artista trajo de vuelta de un viaje una pantera real, como mascota para sus hijos. Estas obras buscan rendir homenaje al multifacético legado de Páez Vilaró". Acerca de la figura del uruguayo, Cozzo enfatiza su importancia en el imaginario del Carnaval. "En mi percepción, fue una personalidad que habría requerido de una mayor dimensión y exposición. Fue muy generoso con el museo; le regaló un cuadro dedicado, que tenemos destacado al ingreso de la exposición permanente”, detalla.

Para completar un repaso por los puntos más atractivos del lugar, vale saber que en la Plaza del Carnaval del Museo, que es en donde funciona el Tablado de Barrio, también fueron intervenidos los bancos, y la obra del Taller de Mosaicos del Uruguay, se inspiró en el arte de Páez Vilaró.
Para aquellos que deseen explorar a fondo la historia y el arte del Carnaval, el museo ofrece visitas guiadas y talleres artísticos, que pueden coordinarse a través de [email protected] o al teléfono 2916 5493.
Toda la información está disponible en www.museodelcarnaval.org