Laboratorios Microsules lanzó en Uruguay y en varios países de la región y del mundo su nuevo garrapaticida Atila, un producto basado en Fluralaner al 5 % que promete marcar un antes y un después en la lucha contra las garrapatas multirresistentes. Su fórmula de última generación ofrece una solución efectiva y duradera, adaptándose a las necesidades de los productores ganaderos. Este producto, que es innovador y nace con la intención de conquistar el mercado, se suma a una amplia gama de garrapaticidas de la marca.
Un aliado en la lucha contra la multirresistencia de la garrapata
Las garrapatas representan uno de los principales desafíos sanitarios en la ganadería uruguaya. La multirresistencia de este parásito ha complicado su control, generando pérdidas económicas y problemas sanitarios.
El doctor Gonzalo Simone, asesor técnico de Laboratorios Microsules, explicó que Atila es un producto que genera muchísimas ventajas en el control de garrapatas y agregó que su mayor fortaleza es que elimina las garrapatas multirresistentes a otros principios activos.
De esta forma, el nuevo garrapaticida se presenta como una solución efectiva, incluso para los casos en los que se cree que ya está perdida la batalla frente a la garrapata.
El uso de Atila dentro de un plan de control integral, con rotación de principios activos y asesoramiento veterinario, permitirá gestionar mejor la problemática y prolongar su efectividad en el tiempo. "Es un producto que se tiene que preservar y cuidar. Se ha llegado a él después de mucho trabajo y recomendamos integrarlo al control de la garrapata de manera estacional", enfatizó Simone.
En condiciones óptimas, su aplicación en invierno puede ofrecer hasta 120 días sin garrapatas, mientras que en primavera y verano el control se mantiene por unos 70 días. Aplicado correctamente, Atila garantiza la eliminación efectiva de todos los parásitos sin generar residuos que puedan afectar la calidad de la carne destinada a consumo.
No obstante, Simone remarca la importancia de un buen uso del producto: “Atila puede ser la solución si nosotros lo utilizamos con raciocinio, con asesoramiento técnico veterinario permanente y con un control integrado a la demás drogas para controlar de una buena vez la existencia de las garrapatas multiresistentes”
Los hunos eran pueblos nómades formados a partir de varios grupos étnicos procedentes de Asia Central, junto con grupos conquistados del área balcánica. Atila fue el jefe de estos pueblos, “que vino del norte a arrasar la defensa del Imperio Romano”, explicó Simone. Y, por eso, este nuevo producto lleva su nombre: “La garrapata son los romanos y con Atila vamos a generar una brecha en el control y en el ataque a las garrapatas. Es una oportunidad para volver a controlar este parásito que en muchos lugares está causando estragos”.
Fácil aplicación y mayor tranquilidad para el productor
Atila se administra de 1 ml cada 20 kilos de peso vivo, aplicándose en el lomo del animal desde la cruz hasta la cola. Su fácil aplicación evita complicaciones y permite su uso en distintos tipos de establecimientos ganaderos. "El productor está acostumbrado a utilizar distintos productos. Este, en particular, no requiere instalaciones complicadas y asegura que no haya garrapatas sobrevivientes ni necesidad de repetir tratamientos", señaló Simone, quien agregó que es importante no hacerlo un día de lluvia: “Se recomienda usarlo hasta seis horas antes del inicio de lluvia”.
El momento ideal para iniciar el tratamiento es hacia el final de la temporada o en agosto, cuando la nueva generación de garrapatas comienza a emerger. Así, se logra un control temprano y se previene la propagación del parásito.
El producto está disponible en toda la red de distribuidores de Laboratorios Microsules en Uruguay, especialmente en el norte del país, donde la problemática de la garrapata es más crítica.
Con Atila, Laboratorio Microsules ofrece una herramienta innovadora que puede marcar la diferencia en la lucha contra las garrapatas. La clave estará en su uso responsable y en la implementación de un plan sanitario integral que permita maximizar su eficacia y prolongar sus beneficios en el tiempo. "Siempre decíamos que era muy improbable que apareciera una nueva molécula para controlar la garrapata. Atila puede ser esa luz al final del camino", concluyó Simone.