La naturaleza culminó con éxito el llenado de los 13.000 metros cúbicos del lago del Parque Rodó, que ayer lucía casi pleno y libre de suciedad.
Las lluvias que cayeron desde finales de julio permitieron cumplir la última etapa, una vez que terminaron las obras de remodelación y se cerraron las compuertas. En algunos islotes se pueden observar los focos, aún no inaugurados, que darán iluminación a toda el área y resaltarán los lugares o esculturas más relevantes. Las tareas de reacondicionamiento comenzaron en noviembre de 2016.

TRAS OBRAS DE REMODELACIÓN