La experta en educación y formación docente argentina Rebeca Anijovich, estuvo en Montevideo para una disertación sobre uno de los temas más actuales y debatidos en el actual estado de la educación: el aprendizaje por proyectos.
La charla fue en el Colegio Nacional José Pedro Varela (en su sede de Colonia 1637), ante una audiencia numerosa y que aguardaba las palabras de Anijovich con expectativa. Como comentó la directora de Educación Inicial y Primaria del colegio Silvana Lara (ver más abajo), Anijovich es una figura muy reconocida en el universo de la docencia. Ya sea porque muchos acudieron a sus cursos, o porque leyeron algunos de sus numerosos libros (entre ellos, “La evaluación como oportunidad”, 2017, o “El sentido de la escuela secundaria”, 2020, ambos junto a Graciela Cappelletti). Lara agregó que los postulados de Anijovich forman parte de la filosofía educativa del colegio.
Lo que expuso Anijovich es una forma de abordar la enseñanza a través de proyectos que involucren a varios alumnos, y en los cuales estos se nutren de múltiples disciplinas en las búsquedas de conocimiento y aprendizajes para poder concretar los objetivos planteados.
Este tipo de proyectos pueden surgir por iniciativa propia de los alumnos, a instancias del o la docente o por un hecho relevante socialmente, e involucran a varias disciplinas como idioma, historia, literatura y otras asignaturas. A través del trabajo curricular mancomunado, los estudiantes concretan dicho proyecto y en el camino aprenden a tomar decisiones, trabajar en equipo y presentar lo aprendido tanto de manera tradicional como con las más recientes expresiones tecnológicas.
Anijovich abrió su charla con una frase que daba cuenta de que el tema a tratar es un tópico actual y candente: “Hay temas en la educación que se ponen de moda, y entonces los docente vamos como sufriendo esas modas: el trabajo colaborativo o cooperativo, la neurociencia… Vamos pasando por modas y no logramos establecer eso que comienza como una moda se convierta en un modo”.
De ahí que hiciera hincapié en contemplar al aprendizaje basado en proyectos como un modo de encarar la enseñanza, una metodología de trabajo. No el único, y no siempre, pero uno que hay que conocer y desarrollar para poder implementarlo de la mejor manera posible en un contexto didáctico. ”¿Es mejor trabajar con proyectos que todo el tiempo dar clases expositivas? Sí. Pero no necesariamente siempre tengo que trabajar de esa manera. No hay ninguna metodología que resuelva todos los problemas”.
Para ahondar en la comprensión de esta metodología, Anijovich tipificó al alumno contemporáneo, y lo calificó como un “protagonista”. ¿Qué significa esta conceptualización del educado? Como expuso, un alumno protagonista es mucho más que el estudiante “activo” (que fue la continuación del “pasivo”, que se sentaba a tomar notas). “Nos referimos a un estudiante protagonista porque este, hoy, aprende también fuera de la escuela, a través de las tecnologías. Cuando no sabe algo, no espera llegar a la escuela para averiguarlo. Googlea, o le pregunta a Chat GPT”. En otras palabras, son estudiantes que protagonizan sus propios aprendizajes.
Anijovich vinculó esta condición a dos conceptos que postulaba, hace más de un siglo, el pedagogo Jerome Bruner (1915-2016): agencia y autoestima. “El primero indica la autonomía para tomar decisiones, y lo articulaba con el de autoestima. Algo así como que cuantas más decisiones puede tomar un estudiante sobre sus aprendizajes, más posibilidades de construir por un lado autoestima, y por el otro autonomía”. En el contexto del presente, agregó Anijovich esto es necesarios —acotó— porque el mundo hoy está en constante cambio y un estado de incertidumbre. Y un estudiante autónomo, con poder de toma de decisiones, y conciencia sobre sus propias fortalezas y debilidades, tiene más oportunidades para desenvolverse.
Contribuir a que el o la estudiante alcance ese grado de autonomía y autoestima es un proceso, que lleva su buen tiempo. “No se hace en un mes ni en un año. Un estudiante protagonista tiene libertad para elegir y tomar decisiones, pero responsabilidad sobre lo que elige”. Y eso se logra, de acuerdo con Anijovich, en la medida que el cuerpo docente pueda contribuir a que ese individuo pueda aprender en profundidad, lo opuesto a un “aprendizaje débil”, un concepto que podría sintetizarse en la frase “Lo aprendo, lo apruebo y me olvido”.
La comprensión profunda es todo un desafío, en particular porque hay un factor sobre el cual no se tiene control: el tiempo disponible para el estudio y el aprendizaje. Porque desde fuera del mundo docente, se pide y exige planes de estudio más cortos, no a la inversa.
Dada esta condicionante, dijo Anijovich, se impone elegir qué es lo que se intentará aprender en profundidad, y cómo: “Es importante que un alumno pueda hacer visible lo que aprendió, y que pueda poner en palabras qué caminos eligió para llegar a ese aprendizaje”.
Transformación educativa
La directora de Educación Inicial y Primaria del Colegio Nacional José Pedro Varela Silvana Lara fue quien tuvo la iniciativa de convocar a Rebeca Ajinovich para la charla. “Este es mi primer año en el cargo y la dimensión pedagógica y de actualización de docentes estuvieron dentro de mi propuesta de trabajo porque para mí son muy importantes. Por eso contacté a Rebeca para que pudiera venir".
Lara agregó que Anijovich es una figura de referencia en el tema Transformación educativa, “y nosotros estamos trabajando en base a aprendizaje por competencias, no en contenidos”. En ese sentido, la charla de la oradora contribuyó a clarificar y reforzar los conceptos más importantes de esta metodología educativa, parte integral de la propuesta del colegio. “Fue muy positivo escucharla con la simpleza y la humanidad que la caracteriza”.