El director de la Oficina de Planeamiento y Presupuesto (OPP), Álvaro García, dijo ayer que en este punto de la negociación con UPM, Uruguay "tiene diversas alternativas de financiamiento por su conducta en los últimos años, la manera de administrar la deuda, y por el grado inversor otorgado por las calificadoras de riesgo más importantes".

El País informó que una alternativa que maneja El Poder Ejecutivo es una fórmula mixta para la financiación de la infraestructura que requiere UPM para la instalación de su segunda planta. La empresa se haría cargo de una parte importante de la inversión, que luego se debitaría del canon que debe pagar una vez que comience a operar.

García dijo al portal de Presidencia de la República que el Gobierno conformó siete comisiones técnicas que están trabajando "mucho". De todos modos, agregó que "se está en fase inicial. Por lo tanto no están determinadas con exactitud cualquiera de las cifras relacionadas con la infraestructura necesaria, dado que en esta etapa se hace el relevamiento y prediseño de los proyectos".

Según opinó, este "es un proceso importante y desafiante porque se trata de la mayor inversión de la historia en nuestro país. Esta incluye la construcción de la planta en sí, la forestación y los temas anexos que son responsabilidad de la empresa, y la inversión en infraestructura que es responsabilidad del Gobierno", sostuvo García al referirse a la instalación de una nueva planta de celulosa de la empresa UPM.

"Estos procesos son complejos y llevan tiempo, y por lo tanto es bien importante tomarlo con responsabilidad, calma, y dar los pasos uno a uno", sostuvo.

En una primera instancia, el presidente Tabaré Vázquez informó que UPM invertirá US$ 4.000 millones en la planta y Uruguay otros US$ 1.000 millones en la infraestructura necesaria. En materia de infraestructura, se requiere bituminizar 224 kilómetros de rutas, y se trabajará en el arreglo de las vías ferroviarias.

NUEVA PLANTA