NEGOCIACIÓN LABORAL

Un acuerdo entre el Ministerio de Trabajo y Seguridad Social (MTSS), los propietarios de la Cooperativa Médica Treinta y Tres (Comett) y el sindicato de trabajadores destrabó ayer un conflicto laboral, luego de que la mutualista cesara a 22 empleados en el marco de un proceso de reestructura.

El ministro de Trabajo y Seguridad Social, Ernesto Murro, dijo que "se firmó un acuerdo que implica el reintegro de una veintena de trabajadores, el pago de jornales adeudados y el pago de la cuota sindical que la empresa había suspendido".

Murro destacó el rol que tuvo la Federación Uruguaya de la Salud (FUS) en la negociación, así como del Ministerio de Salud Pública (MSP). El secretario de Estado agregó que la situación afectaba la atención médica de 2.000 afiliados.

Pese a los despidos, el centro privado siguió funcionando con nuevo personal contratado a través de una empresa tercerizada. Se trata de un prestador de la ciudad de Treinta y Tres que cuenta aproximadamente con 3.000 socios, de acuerdo a los datos que brindó a El País la dirigente sindical Karina Silveira, quien había resultado despedida en forma directa.

"Perdió la calidad de mutualista y ahora Comett está catalogada como una institución de asistencia de Primera Atención", dijo la dirigente sindical.

Los funcionarios se oponen al despido y envío de trabajadores al seguro de paro. La sindicalista agregó que "quedaron con dos camas de internación por casos de observación además de sus policlínicas".

Según Silveira, tampoco fue exitoso el trámite para que los propios trabajadores logren entablar un diálogo con los cooperativistas de la prestadora, integrada por profesionales de la Salud y del Derecho.

A su vez, se canceló el block quirúrgico y la sala de partos, sostuvo. Silveira comentó que "los socios, con una carta dirigida al Banco de Previsión Social (BPS), pueden pasarse a ASSE, a Médica Uruguaya o al IAC (Instituto de Asistencial Colectiva)".