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Desconcentrado

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Hernán Casciari habla de "desconcentración" en estos tiempos. Yo no tengo ese problema, solo que a veces los noticieros televisivos y las novedades me enloquecen con las estupideces del día y los rumores de volar en mil pedazos ante la bomba del terrorista de turno o la contaminación de último momento.

¿Qué dijo el Papa? ¡Ah! Tengo que ir a buscar a alguno de mis hijos a no sé que lugar ahora mismo. ¡Joder! Se creen que soy UBER los tipos. ¿Que me llamó quién? ¡Noooo, a ese decíle que no estoy! Ese solo garronea consultas y nunca paga nada. Típico uruguayo que afana el laburo del gil y sale chocho de la vida con su fechoría. ¡Pará, pará, paráaa que estoy escribiendo en la compu y no me puedo concentrar! ¿Cómo era que se hacía para recuperar los documentos que se te borraron carajo? ¿Qué teclas apretabas? ¡Uyyy que linda revista esta de Rico Tipo que compré en la feria, me trae recuerdos! Perdón, ¿en qué estaba yo mismo?

A mí me gusta escribir porque es un rato en el que me "concentro", lo que me sucede es que ahora me tenté con ir a Youtube y mirar viejos grupos musicales que me resultan increíbles que hayan alcanzado el éxito alguna vez. Antes se colaban algunos giles de goma y aparecían los cursis —como Montaner o Arjona en sus clips grotescos— por lo que me viene una bronca loca cuando los veo. (No sé si les tengo envidia por sus éxitos chillones y todo lo que sedujeron estafando mujeres o me dan vergüenza de género). Me parece que me estoy distrayendo de escribir lo que debería escribir, que ya ni sé que era. Me divago. ¿En qué estaba?

En realidad discrepo con Casciari, creo que la desconcentración es la nueva forma de estar concentrados que tenemos en la actualidad, donde somos picaflores, volantes, generalistas y multitemáticos. Los capos de la neurociencia actual argumentan a favor de esta forma de ser que tenemos y sostienen que los videosjuegos son fenomenales para los menores. Que los avivan y no los achotan como sostienen las pedagogas antiguas. Parece que la mente puede jugar en varios frentes y por eso podemos hacer varias cosas a la vez: contestar correos, leer, mirar el WhatsApp, observar a tu hermano que no se suicide por la ventana, prestar atención a la llegada del cobrador de la mutualista y hasta relojear la vecina del edificio frente al tuyo para ver si sigue estando tan bien dotada como siempre.

¿Leer ocho horas seguidas? Eso es para gente de otro tiempo, para veranos eternos que casi no existen, digamos para una sociedad en letanía permanente. Ya casi no quedan especímenes con esa forma de ser, por eso se viene perdiendo "algo" pero se están ganando otras cosas. Los jóvenes de hoy decodifican las imágenes como nadie en la tierra. Ellos leen las pantallas, son visuales, las generaciones anteriores no. Exactamente igual les sucede a los más chicos con El Quijote de la Mancha o con Rey Lear. Poné a un septuagenario a ver Matrix, cree que lo metiste en el manicomio. Este es el punto de quiebre en el que estamos. Lo visual, la telefonía interconectada y el mundo de imágenes nos vienen cambiando a todos, inclusive a los más grandes que empezamos a asimilarnos a una legión de tribus en donde la "supuesta" desconcentración actual es hija de la imagen, de una vinculación social novedosa y de una entramado social distinto al que teníamos hasta hace un rato. No temamos, ya ganó ese tiempo. Se le teme a lo desconocido, esto ya está aquí.

El teléfono portátil y su victoria rampante sobre todos nosotros es la demostración que algunas necesidades —como estar conectados siempre— las teníamos de manera intensa, que la globalización es real (hablo todos los días horas con amigos en el exterior durante ratos largos vía WhatsApp) y el mundo se hizo una pelotita diminuta que queríamos tener entre las manos y achicar. Julio Verne había pensado algunas de estas cosas. Lo de él fue solo imaginación literaria, nosotros la estamos viviendo de manera cotidiana. Es sencillamente maravilloso ver en el día a día todo lo que avanzamos. Sí, la "desconcentración" actual me encanta, me fascina y la necesito.

CABEZA DE TURCO IWASHINGTON ABDALA

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