La amenaza se dio a conocer sobre las 14:30 horas, momento en que se tomaban pruebas parciales. El centro educativo fue autoevacuado por estudiantes, funcionarios y docentes.
La Facultad de Medicina fue autoevacuada esta tarde por los funcionarios, docentes y estudiantes, luego que una llamada anónima advirtiera que había una bomba oculta en el edificio educativo.
La llamada, recibida sobre las 13:30 horas, ocurrió en tiempo que se realizaban pruebas parciales, por lo que no se descarta la hipótesis que haya sido una llamada de un estudiante tratando de postergar una prueba.
De todas formas, al lugar concurrió personal de Bomberos para realizar una inspección ocular y llamar a la división de artefactos explosivos del Ejército en caso que se hallara un artefacto explosivo.
Pero tras unas horas de trabajo, quienes participaron del operativo de búsqueda no encontraron rastro alguno de una bomba o un paquete sospechoso, informó a El País el vocero de Bomberos, Leandro Palomeque.
Tras no encontrar amenaza, el centro educativo retornó a sus tareas habituales, pero las pruebas parciales quedaron reprogramadas para la semana que viene.
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