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El juicio a Trump

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ANDRÉS OPPENHEIMER
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En medio de la avalancha de noticias sobre el juicio político del presidente Donald Trump en los últimos días, llamé a Allan Lichtman, el historiador político de la Universidad de Estados Unidos que pronosticó de manera correcta prácticamente todas las elecciones presidenciales de los Estados Unidos desde 1984. Quería escuchar sus pronósticos sobre el juicio político y sobre las próximas elecciones de noviembre. .

En 2017, Lichtman predijo con precisión que Trump sería acusado. Antes de las elecciones de 2016, pronosticó correctamente la victoria de Trump, cuando las encuestas daban Hillary Clinton como la favorita.

Lichtman me aclaró que aún no ha hecho su predicción final para las elecciones de 2020, pero ofreció algunas pistas valiosas. Dijo que Trump será absuelto por la disciplinada mayoría republicana en el Senado -lo que no sería una sorpresa-, pero agregó que la acusación puede costarle mucho en las elecciones de noviembre.

"El juicio de juicio político es muy importante", dijo Lichtman. "El pueblo estadounidense tomará una decisión sobre si ha habido un juicio justo y si Trump ha abusado o no de su poder", y sus conclusiones pueden no ayudar al actual presidente en noviembre, agregó.

Interpretando al abogado del diablo, le pregunté a Lichtman sobre el escenario opuesto: que Trump será absuelto gracias a la mayoría republicana del Senado, como se esperaba, y que luego se lanzará a la ofensiva y dirá: "Ves, te lo dije, todo esto el juicio fue una cacería de brujas".

Lichtman respondió que no es probable que la mayoría de los estadounidenses compren ese argumento. Ya antes del juicio político, el 51 por ciento de los estadounidenses dijo que quería que Trump fuera juzgado y destituido de su cargo, según una encuesta de CNN. Es probable que las cosas solo empeoren para Trump a medida que avanza el juicio y se conozcan los testimonios de los testigos, dijo.

Sorprendentemente, la fortaleza de la economía estadounidense no será suficiente para que Trump sea reelegido, dijo Lichtman. El profesor basa sus predicciones en un modelo de pronóstico de 13 claves que desarrolló, en el que un presidente en funciones gana si tiene menos de seis claves negativas en su contra.

"En este momento, Trump tiene cuatro o cinco claves", como la victoria demócrata aplastante en las elecciones parciales de 2018, dijo. "Por lo tanto, se necesitaría una clave más para contarlo".

La economía es solo uno de los muchos predictores, explicó. Si hubiera sido el más importante, Hillary Clinton habría ganado en 2016, porque tenía una economía muy fuerte que jugaba a su favor, dijo.

Lo que los demócratas necesitan para ganar en noviembre es un candidato carismático, dijo Lichtman.

“La obsesión con la ideología del candidato demócrata es totalmente engañosa. No hay relación entre ideología o problemas en el resultado de las elecciones”, agregó. Citó los casos de candidatos probados y experimentados como Mike Dukakis en 1988, Al Gore en 2000, John Kerry en 2004 y Hillary Clinton en 2016, todos los cuales perdieron sus elecciones.

"Lo único que importa, según mis claves, es si obtienes un demócrata inspirador, una figura carismática que sacuda al electorado, como John F. Kennedy o Barack Obama", dijo Lichtman.

En este momento, Lichtman no ve ningún candidato carismático entre los aspirantes demócratas actuales. Pero podría surgir durante los próximos debates, o podría aparecer una candidatura sorpresa en el futuro, "como la ex primera dama Michelle Obama", agregó.

Estoy de acuerdo con la mayoría de los puntos de vista de Lichtman, especialmente con su insinuación tácita de que la ex primera dama sería una candidata demócrata formidable si se uniera a la carrera. (¡Por favor, Michelle, entra!)

Pero no estoy convencido de que el juicio de destitución de Trump sea un factor importante en noviembre. Por el contrario, me temo que incluso si la mayoría de los estadounidenses se dan cuenta de que Trump evitó que testigos clave testificaran, probablemente porque tiene algo que ocultar, todo esto puede olvidarse mucho antes de las elecciones.

Trump es un maestro de la distracción masiva y seguramente se le ocurrirá un escándalo paralelo, o una guerra, o algo más para desviar la atención de su registro de mentiras descaradas, abusos de poder, crueldad contra los niños inmigrantes, no mostrar sus declaraciones de impuestos. , negaciones del cambio climático, oposición a las leyes de seguridad de armas y muchos otros pecados.

Sí, el juicio político es importante, pero si los demócratas se centran demasiado en él en los próximos meses, no tengo dudas de que serán burlados.

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