POR RAÚL SOARES NETTO
Arrosa gestiona ocho aeropuertos internacionales en Uruguay, que integran Corporación América Airports, un grupo que opera 54 terminales aéreas en seis países: Argentina, Uruguay, Brasil, Ecuador, Italia y Armenia. Nació hace 45 años en Montevideo y cuenta con formación en Dirección y Administración de Empresas, egresado de la Universidad de Montevideo (UM). “El lideraszgo es saber profundamente la industria y el sector de actividad que uno forma parte, para después delegar y plantear objetivos precisos desde el conocimiento”, afirmó. Está casado con tres hijos: Juanita (18), Tomás (15) y Gerónimo (11).
A continuación un resumen de la entrevista de El País con el CEO de Corporación América Uruguay.
—Si le pregunto por el empresario Eduardo Eurnekian, principal del Grupo Corporación América, ¿qué responde?
—Es una persona que siempre está pensando en proyectos a largo plazo, sin importar las coyunturas ni las situaciones particulares planteadas o las crisis que existan. Tanto Martín como Eduardo Eurnekian tienen una visión diferente, apuntan a la excelencia. Cada proyecto que nosotros iniciamos, emprendemos lo hacemos de la mejor forma posible, prueba de ellos es el Aeropuerto de Carrasco.
—¿Estamos ante un aeropuerto modelo para el grupo?
—Sí. Por el contrato de concesión del Aeropuerto de Carrasco, teníamos que cumplir ciertos requisitos, pero fuimos a más. Se realizó un aeropuerto con un diseño único y una operativa que apostó a la excelencia desde todo punto de vista. Cuando uno hace bien las cosas, tiene su retorno.
Para el grupo que opera 54 aeropuertos en todo el mundo, el Aeropuerto de Carrasco es emblemático; es una terminal aérea modelo en cuanto a la operativa, la tecnología aplicada y el desarrollo innovador, además de los aspectos arquitectónicos. El Aeropuerto de Carrasco es de avanzada, donde se pueden hacer pruebas con el objetivo de implementar nuevos conceptos innovadores para la industria.
—Esta nueva terminal aérea se licitó durante el gobierno de Jorge Batlle y se inauguró durante la presidencia de Tabaré Vázquez. Y ahora hay un Sistema Nacional de Aeropuertos Internacionales impulsado por el gobierno de Luis Lacalle Pou. ¿Ahí radica la fortaleza de Uruguay a la hora de definir un proyecto de inversión y asumir riesgos?
—Uruguay está destacado en la región y el mundo por su estabilidad y calidad institucional. Lo lindo y destacable, es que la habilitación de la ampliación de la concesión del Aeropuerto de Carrasco fue un proyecto de ley que se inició en 2018 durante el gobierno del Frente Amplio. Nuestro negocio es de muy largo plazo, que requiere una inversión inicial importante y con plazos largos de recuperación. En el mundo, los plazos de concesión de los aeropuertos van desde 30 hasta 80 años. Porque hay muchas incertidumbres; existen problemas sanitarios, como el COVID o la gripe aviar, la nube de cenizas, ataques terroristas y guerras... Es una industria muy sensible a las crisis internacionales, motivo por el cual las concesiones se realizan por largos períodos de tiempo para recuperar las fuertes inversiones realizadas al inicio. Por eso es tan importante la estabilidad e institucionalidad de los países. Todo está simbolizado en el corte conjunto de cinta del nuevo Aeropuerto de Carrasco por parte de Batlle y Vázquez. Es una señal muy fuerte que se ha continuado en el tiempo y que hay que cuidar.
—Y esa señal potente, ¿cómo se refleja en las inversiones de Corporación América en Uruguay?
—En estos 20 años de presencia, se ha invertido unos 800 millones de dólares considerando la terminal aérea de Carrasco y Punta del Este, así como la operación de la cadena de farmacias San Roque, que luego se vendió, y el desarrollo de un parque de energía eólica de 230 millones de dólares, que también se vendió. Sólo en la operativa de los aeropuertos en este tiempo se invirtieron más de 500 millones de dólares. En tanto, el Sistema Nacional de Aeropuertos Internacionales, conformado por Carmelo, Paysandú, Salto, Rivera, Melo y Durazno, significa más de US$ 70 millones de inversión y más de 300 millones de dólares considerando todos los rubros de la operativa de estos aeropuertos del interior.
—Tras la pandemia, ¿cuáles son hoy los grandes números de Aeropuertos Uruguay?
—Todavía no hemos alcanzando el número de pasajeros de 2019. La terminal de Punta del Este, aunque crecieron muchísimo los vuelos privados, en cantidad de pasajeros está un 30% por debajo de los niveles de prepandemia. En el Aeropuerto de Carrasco, vamos a cerrar este año con una caída del 10%, para alcanzar 1,9 millones de pasajeros. En cambio, Uruguay está más conectado que antes de la pandemia de COVID. Con los últimos anuncios, existen conexiones con 15 ciudades de forma semanal, a través de los vuelos de once aerolíneas, frente a las 13 ciudades en la etapa pre-covid. Próximamente, todo indica que se sumarán rutas y también iniciarán operaciones nuevas compañías aéreas, que esperamos que las propias empresas realicen sus anuncios.
—¿Cuál es el balance a un año de operaciones del Aeropuerto de Carmelo?
—Este año el aeropuerto de Carmelo movilizó cerca de 3500 pasajeros, a través de vuelos privados de Argentina, Brasil y Paraguay. Para 2024, va a duplicar en cantidad de pasajeros y movimiento respecto al registro histórico. Esto habla del potencial de crecimiento, una vez que se inauguren el resto de los aeropuertos. El Sistema Nacional de Aeropuertos Internacionales es viable y es un proyecto necesario para un modelo de desarrollo descentralizado de país. Se debe visualizar como un círculo virtuoso. Hay que invertir en infraestructura para luego generar el movimiento de pasajeros y potenciar el destino.
UN HITO PARA LA INTEGRACIÓN
—La terminal aérea de Rivera presenta la particularidad de ser binacional, un hecho histórico en la integración física con Brasil. ¿Cuándo está prevista la inauguración?
—El 11 de diciembre y es un buen ejemplo de integración. Rivera es el primer aeropuerto binacional de Latinoamérica y el cuarto en el mundo. Desde hace más de 15 años que se venía hablando con Brasil de transformar el aeropuerto en Binacional, para aprovechar la infraestructura de la forma más eficiente. La inversión en el aeropuerto permitió concretar aquello que se venía hablando hace 15 años. Es una muestra más de que la inversión en infraestructura luego derrama en mayor actividad. Extraoficialmente, hay una aerolínea brasileña que va a comenzar a volar no bien quede operativa la terminal.
—¿Cómo sigue el plan de inauguraciones de los aeropuertos en el interior del país?
—En un año vamos a inaugurar tres aeropuertos. A Carmelo, que comenzó a operar en diciembre de 2022, ahora se sumarán Rivera y Salto. En 2024, comenzarán a operar los aeropuertos de Melo (julio), Paysandú (octubre) y Durazno (diciembre). En los aeropuertos del litoral, hay un enorme potencial con el turismo termal y el sector productivo. Y en el caso de Paysandú la prestación de servicios de mantenimiento y reparación de las aeronaves particulares. En Rivera y Melo, en tanto, está proyectado el desarrollo de infraestructura logística. Por su parte, en Durazno están dadas las condiciones para ser una terminal de cargas, ya que está ubicado en el centro geográfico del país y está próximo al Ferrocarril Central y la planta de UPM. En el mediano plazo, se va a transformar en un importante polo logístico, integrado al sistema multimodal de cargas. En Durazno también se instaló un nuevo radar, junto a un ILS, que es un avanzado sistema de aterrizaje por instrumentos. En Punta del Este, en estos años se desarrolló mucho el tema del taxi aéreo y los vuelos particulares luego de la pandemia. Punta del Este hoy tiene 130.000 pasajeros anuales.
—¿El desarrollo de los aeropuertos internacionales también permite a Uruguay tener un mayor control del espacio aéreo?
—Ese tema es competencia del Ministerio de Defensa Nacional. Nuestros radares son civiles, con el objetivo de gestionar el espacio aéreo vinculado a las aeronaves y las aproximaciones a las terminales. Para los controles de seguridad, son otros tipos de radares. Nuestros radares visualizan los aviones comerciales.
PUENTE AÉREO
—¿Qué ingresos anuales tiene actualmente Corporación América Uruguay por la gestión de los aeropuertos internacionales de Carrasco, Punta del Este y Carmelo? ¿Qué crecimiento proyectan a futuro con las nuevas terminales ya operativas?
—Estamos en el orden de los 100 millones de dólares. Para 2024, proyectamos que el Aeropuerto de Carrasco va a recuperar el nivel de pasajeros de 2019, con un mayor número de conexiones. Y, con todas las infraestructuras aeroportuarias que estamos desarrollando, estamos teniendo una recuperación de la actividad más acelerada. De todos modos, hay que considerar la coyuntura internacional, dado que hay una menor oferta de asientos de avión y el precio combustible está alto, que lleva a un aumento del costo de los pasajes de avión.
—¿Es un debe no contar con una aerolínea de bandera uruguaya para cubrir el puente aéreo entre Montevideo y Buenos Aires?
—Hoy somos dependientes de una sola aerolínea y ahí hay un trabajo para hacer en facilitación y liberación de los cielos... Nuestro plan y de la mano del gobierno, es trabajar en tener cielos abiertos con Argentina y el mundo. Con Argentina, hay un convenio de 60 frecuencias semanales de puente aéreo. Para operar una compañía aérea desde Uruguay, hoy se debe instalar; eso limita y lleva a una pérdida de interés. En el mundo, Estados Unidos abrió sus cielos con México: ese es el camino a seguir.
Combustible sustentable uruguayo para aviones
Corporación América Uruguay está trabajando en el desarrollo de los denominados SAF o “Sustainable Aviation Fuel”.
“Tenemos algunas iniciativas ya que Uruguay tiene un enorme potencial para producir ‘combustibles verdes’ para la aviación”, afirmó Arrosa, para agregar que “Uruguay hoy exporta el 90% del cebo animal, que se puede transformar en combustibles sostenibles de aviación, así como el aceite de colza”.
También destacó el desempeño de la terminal de cargas del Aeropuerto de Carrasco, que obtuvo un Premio Internacional de excelencia logística por la gestión de vacunas contra el COVID.
“Actualmente hay más de doce laboratorios instalados para distribuir productos para la región. Este año hemos lanzando la operación Pharma 3 LACC con un nuevo depósito”, indicó Arrosa.