El secretario de Estado norteamericano John Kerry mantuvo ocho horas de reuniones ayer con el presidente ruso Vladimir Putin y su canciller Sergei Lavrov en Sochi (sur de Rusia), con ciertos "indicios de distensión", según los participantes.

El encuentro permitió "entendernos mejor", si bien "no estuvimos siempre de acuerdo durante nuestra conversación", declaró Lavrov, mientras que Kerry indicó que las sanciones contra Rusia pueden ser suspendidas "si y cuando" se respete plenamente el alto el fuego en Ucrania.

Las dos potencias atraviesan su peor momento en sus relaciones bilaterales desde la caída de la Unión Soviética en 1991. El viaje de Kerry a la residencia de verano de Putin fue el primero de un alto funcionario estadounidense a Rusia tras el inicio del conflicto en Ucrania.

Kerry, que debe viajar hoy a la ciudad de Antalya, en Turquía, para una cumbre de la OTAN, expresó que había una "necesidad urgente" para Estados Unidos de cooperar con Rusia para enfrentar desafíos globales.

Lavrov añadió por su parte: "Comprendemos la necesidad de evitar pasos que puedan infligir daño a largo plazo en las relaciones bilaterales en temas diversos".

Moscú y Washington se concentrarán para lograr un único objetivo: "lograr que aquellos que firmaron los acuerdos del 12 de febrero (en Minsk) los respeten", aseguró el canciller ruso. AFP

Primer encuentro EE.UU-Rusia desde la crisis de Ucrania