Lo vinculan a Aníbal Fernández y a los barras bravas.

La Policía federal argentina detuvo ayer a un dirigente kirchnerista en el marco de la búsqueda de los tres condenados a prisión perpetua por un triple asesinato en 2008, quienes fugaron de una cárcel de máxima seguridad hace una semana.

El detenido es Marcelo Mallo, un conocido para el poder: es el jefe de Hinchadas Unidas Argentinas, la polémica ONG para que barra bravas de clubes argentinos pudieran viajar gratis al Mundial de fútbol de Sudáfrica 2010.

Además, Marcelo Mallo fue uno de los dirigentes de la agrupación kirchnerista Compromiso K.

Mallo había sido relacionado con Aníbal Fernández, el exjefe de Gabinete de Cristina Fernández, quien fue acusado públicamente durante la campaña por uno de los prófugos de estar involucrado en el asesinato por el que fueron condenados él y sus dos compañeros.

Ayer, la Policía bonaerense llevó a cabo un megaoperativo en el sur para dar con el paradero de los prófugos, quienes fueron involucrados por la Justicia en una red de tráfico de efedrina.

Las fuerzas policiales realizaron en las últimas horas 37 allanamientos, centrados en domicilios de personas que aparecen de alguna u otra forma vinculadas a los criminales en la causa por la que fueron condenados.

Según consignó la agencia DyN, el ministro de Seguridad bonaerense, Cristian Ritondo, desplazó a la cúpula de la cúpula de la Dirección Departamental de Investigación (DDI) de Quilmes por "fallas en los procedimientos" para dar con los prófugos. El Gobierno de María Eugenia Vidal sospecha que los delincuentes cuentan con cobertura política y complicidad policial.

El domingo, Ritondo salió a hablar sobre el caso y aseguró que Aníbal Fernández "tiene mucho que ver con el submundo de Quilmes".

"Creo que Aníbal Fernández está involucrado con todo lo que tiene que ver con el submundo de Quilmes. Aníbal Fernández tiene que ver con muchas cosas que pasan en esa zona. Porque donde se toca está la foto de él o tiene vinculación con él, tiene mucho que ver con este submundo", enfatizó.

Además, admitió sus dudas respecto al accionar de los responsables de la investigación. "Sin duda tengo dudas si no hay sectores policiales que comparten data con este tipo de mafias en esas zonas del Gran Buenos Aires", reconoció el ministro bonaerense, quien destacó que por esta situación han "sumado ahora, con mayor presencia de coordinación y correlación, las fuerzas federales".

Fernández le contestó a Ritondo: "Le informo a Ritondo que sus prófugos no andarían por ningún submundo sino por la casa de la suegra y la verdulería (hubo una denuncia que reveló que Cristian Lanatta amenazó a su exsuegra y le llevó su camioneta)".

Una de las diputadas más destacadas de la alianza macrista, Elisa Carrió, dijo ayer que "las mafias de la provincia están tratando de condicionar el poder" de la gobernadora María Eugenia Vidal.

La legisladora volvió a responsabilizar al Servicio Penitenciario Bonarense (SPB) por la evasión de los hermanos Martín y Cristian Lanatta y Víctor Schillaci, reiteró su pedido para que se investigue al ex ministro de Justicia bonaerense, Ricardo Casal , y renovó su denuncia contra Aníbal Fernández, a quien acusa de ser el autor intelectual del triple crimen.

Para Carrió, la fuga y la falta de resultados en la búsqueda de los tres delincuentes son un mensaje para el gobierno de Vidal.

El presidente argentino sigue de cerca el operativo para dar con el paradero de los tres homicidas y hoy se reunirá con Vidal.

El Gobierno intentó poner paños fríos al nivel de inquietud por la fuga de los condenados. Advirtió que así como está siguiendo de cerca el operativo, "tampoco se lo está sobredimensionando".

En tanto, desde la Casa Rosada descataron que aunque ya trabaja en estrecha colaboración con el ministerio de Seguridad nacional, por el momento la gobernadora provincial es la que está a la cabeza de los operativos centrados en la zona sur del conurbano bonaerense.

CRIMEN Y NARCOTRÁFICO EN ARGENTINA