RELEVAMIENTO DE PRIMARIA

Más de la mitad de los maestros faltó a clases el pasado miércoles 15 de setiembre. Cuatro de cada diez (41,82%) se ausentaron con motivo del paro que convocó la central de trabajadores y que contó con el apoyo de los sindicatos de docentes en todo el país. El resto de las inasistencias fueron por otras causas.

El relevamiento que realizó Primaria, a través del pasaje de listas electrónicas, muestra que de los 22.202 docentes, 9.285 faltaron por el paro. Pero la fuerza de la medida varió en cada uno de los departamentos. Mientras en Rivera solo un 7% se plegó al reclamo sindical, en Montevideo lo hizo un 70% (incluso llegó al 75% en la jurisdicción de Montevideo Oeste).

Como ocurre en cada movilización de este tipo, el área metropolitana es la que concentra la mayor adhesión al paro. La zona noreste es el ejemplo contrario.

La Federación Uruguaya de Magisterio es uno de los sindicatos que representa a más trabajadores a escala país. Esta vez las filiales que la integran votaron porque el paro fuera de 24 horas. Y parte de la motivación estuvo ligada a que la coyuntura que atraviesa la educación era uno de los reclamos.

Pero el paro, además, era para los sindicatos docentes una muestra de fuerza. Ocurre que a fines de octubre se elige quiénes serán los representantes de los docentes en el Consejo Directivo Central de la ANEP. En esos comicios que tendrán lugar el 30 de octubre los maestros y profesores decidirán también quiénes serán los delegados de la Asamblea Técnico Docente. Y en Formación Docente se votan los consejeros estudiantiles.

Al mismo tiempo, el paro se da en un contexto de conteo de firmas para impulsar un referéndum de derogación de 135 artículos de la LUC. La Corte Electoral ya aceptó 302.425 firmas y rechazó 28.822.

De haber un referéndum, los sindicatos de la enseñanza se juegan el cambio de la estructura de la gobernanza. La LUC anuló la representación de los docentes en los subsistemas (Primaria, Secundaria y UTU).

Los trabajadores no docentes de Primaria también están nucleados dentro de la Federación Uruguaya de Magisterio (por eso mismo la sigla del sindicato es FUM-TEP). Según el relevamiento oficial, la adhesión al paro de los funcionarios que no son maestros fue considerablemente más baja: 17% faltó por esa causa. Hubo otro 13% que se ausentó por otros motivos.

Muchos de esos funcionarios no docentes eran los responsables de la preparación de las comidas de los escolares. La alimentación, como ocurrió en los tres paros anteriores, fue un tema de disputa entre las autoridades educativas y los sindicatos previo a la medida del miércoles. Unos piden que haya guardia gremial y los otros aducen que la responsabilidad de garantizar la alimentación es del gobierno. Por eso la ANEP dispuso esta vez escuelas sede a las que podían concurrir los niños para hacer uso del comedor.