Ancap confirmó ayer en la comisión investigadora del Senado que anualmente su subsidiaria Cementos del Plata paga US$ 8 millones para llevar cal a una central eléctrica de Candiota en el sur de Brasil, y que lo hace a través de camiones de una empresa brasileña.

Así lo informaron el director del oficialismo Juan Gómez y el gerente del área de cal, José Romero. Además, dijeron que se paga por año otros US$ 7 millones de multa por no cumplir con los compromisos contractuales asumidos cuando se hizo el contrato para llevar el producto desde la planta de Treinta y Tres hasta Candiota.

Los representantes de la empresa explicaron en la comisión que no hubo llamado a oferentes para contratar a la empresa brasileña.

Legisladores de la oposición hicieron ver que el costo del flete por tonelada de cal que cobra la empresa brasileña está un poco por encima del precio del mercado, lo que también significa una pérdida para Cementos del Plata. La situación financiera de Cementos del Plata es también deficitaria, según se explicó en la comisión. La planta de cal donde trabaja la empresa tuvo un costo de US$ 147 millones.

Por su parte, Rosario Pintos, exgerenta de la División Portland hasta 1997, también cuestionó la gestión de los últimos directorios de Ancap, particularmente a raíz de la remodelación de las plantas de Minas y Paysandú. El plan estratégico de Ancap para modernizar las dos plantas tenía una inversión estimada en US$ 118 millones. Hasta ahora se llevan gastados US$ 250 millones y el actual gerente de la División Portland dijo en la investigadora del Senado que se necesitaban US$ 230 millones más para poder poner a punto las dos plantas.

Ancap decidió la remodelación de ambas plantas en 2006, bajo la presidencia de Daniel Martínez, actual intendente de Montevideo. En ese momento, ambas plantas daban una pérdida de unos US$ 3 millones por año. "Ha habido importantes problemas de gestión en toda la empresa. Además, se hicieron demasiadas inversiones", sostuvo Pintos el martes 6 durante su participación en la comisión investigadora. "Cuando me dijeron que iban a hacer cuatro plantas temblé porque nuestro mercado es pequeño y para ese número de plantas habría que tener un mercado exterior grande que abastecer", apuntó.

US$ 7 millones al año