Salud
Un estudio realizado por universidades portuguesas y españolas llegó a la conclusión que los jóvenes que beben mucho alcohol en pocas horas afectan seriamente sus capacidades cognitivas.
Una investigación de la Universidad de Santiago de Compostela y la Universidad del Miño, de España y Portugal respectivamente, llegó a la conclusión que los jóvenes que beben alcohol en exceso desde edad temprana tienen daños cerebrales y problemas cogitivos.
De acuerdo con este nuevo estudio, emborracharse de manera ocasional por grandes consumos de alcohol — como sucede en cualquier previa de fin de semana— trastornan el funcionamiento del cerebro.
La investigación arrojó que el alcohol cambia las oscilaciones del lóbulo temporal derecho y la corteza occipital de los jóvenes. Esto produce dificultades del proceso de la información y control de impulsos. En los menores de 20 años eso supone un gran problema, ya que el cerebro aún no se desarrolló totalmente.
Según informó Muy Interesante, Eduardo López-Caneda, de la Universidad del Miño explicó que los cambios que provoca el exceso de alcohol en jóvenes está muy relacionado a cómo procesan la información.
Para llegar a estas conclusiones, los científicos analizaron el comportamiento de 80 estudiantes de Madrid a los que se los dividió en grupos según el nivel de su consumo de alcohol: por un lado estaban los que no tomaban, o tomaban poco, y por otro quienes lo hacían ocasionalmente como fines de semana o en fiestas. Lo importante era que quienes eran bebedores ocasionales hacían lo que se conoce como binge drinking, que supone tomar en menos de dos horas cuatro o cinco medidas de alcohol o más.
Los análisis arrojaron que los bebedores sufrieron cambios en su actividad cerebral. Sin embargo, advierten que deben hacerse más estudios para comprender cómo estas conductas afectan patrones como la memoria.