@| Escuché al Sr. Presidente hablando de la renuncia presentada por Sendic.

En mi opinión de nuevo el Sr. Tabaré Vázquez no se dirige a la gente como el Presidente de todos los uruguayos, sino más bien como un integrante del partido de gobierno, dividiendo a los ciudadanos cuando dice que el renunciante fue hostigado, fue acosado, que sufrió “bullyng”, etc., llevando a pensar que su renuncia se debió a este hostigamiento y no a los graves errores cometidos durante la gestión en Ancap y tampoco al uso indebido de un título universitario inexistente.

Es cierto que existió esa campaña. Cuando uno recibe un whatsapp si considera que es verídico, acertado y opina que debe difundirse lo envía a sus amigos. También lo hace cuando es gracioso, aunque hubo algunos pasados de tono que sin duda las personas bien educadas no reenviaron.
Es lamentable que el Sr. Presidente que debería tranquilizar a la población en momentos especiales, se dedique implícitamente a buscar culpas y a sembrar dudas aumentando la “grieta”, entre buenos y malos. La palabra “grieta” la usan nuestros vecinos del Plata, pero parecería que ésta concepción primitiva y maniquea de la política en los últimos tiempos no es sólo argentina.

Es muy poco lo que el Sr. Vázquez nos dice como Presidente de todo el país, nunca se olvida que él es uno de los líderes de su fuerza política y todos sus esfuerzos se dedican siempre a justificar, salvaguardar o enaltecer al Frente Amplio (en su totalidad), aunque aún estemos muy lejos de las elecciones.

No se refirió al Vice como persona, no se compadeció de los momentos difíciles que estará viviendo. Sí lo hizo algún referente de la oposición al tocar el tema en una entrevista, lo cual me pareció más humanitario.

Yo escuché lo que oyeron todos los uruguayos y es así como interpreté las palabras del Presidente, quizás tenga una visión distorsionada por mi ideología, pero sinceramente no pude encontrar en su discurso la grandeza que merecería la ocasión.