@|Es impensable que en el siglo XXI estemos presenciando acontecimientos como el hecho de que un perro termine con la vida de un ser humano... O cambie esa vida para siempre, dejando lesiones graves, como una amputación, una cicatriz, e incluso, heridas psicológicas.

Es impensable, pero está pasando.

Y una de las causas principales es la falta de responsabilidad que tienen las autoridades de la Facultad de Veterinaria, cuando dicen que el perro según "como sea criado" refleja su personalidad agresiva. Que las razas agresivas "no existen". Cuando la realidad y los hechos nos muestran lo contrario.

Si de pruebas científicas se trata, desgraciadamente, las estamos teniendo demasiado seguido. Y sin ser ataques de perros de razas peligrosas, también hay ataques de perros sueltos de otras razas e incluso callejeros. O sea, el problema grave que se está teniendo tiene solución con medidas efectivas, y autoridades que cumplan con su función. Como el caso de COTRIVA, que pareciera no hacer nada cuando sucede un hecho como estos. No se sabe si vivimos en medio de una jungla de animales o de seres humanos que no saben ejercer la autoridad, ni arreglar un problema grave.

Hay que prohibir las razas agresivas; hay que realizar castraciones masivas, exigir la tenencia responsable. Y que esté al frente un organismo que sea serio y regule esta situación caótica, y con demasiadas víctimas...