La Corte Suprema chilena dictó sentencia definitiva en la investigación por los delitos de secuestro, homicidio y asociación ilícita en la muerte de Eugenio Berríos. Tres militares uruguayos fueron condenados.
La Corte Suprema chilena dictó sentencia definitiva en la investigación por los delitos de secuestro, homicidio y asociación ilícita en la muerte del exquímico, Eugenio Berríos, un ex agente de la dictadura de Augusto Pinochet, según informa La Tercera.
Tres militares uruguayos fueron condenados: Tomás Casella Santos, Eduardo Radaelli Copolla y Wellington Sarli Pose.
El primero fue condenado a 10 años y un día por su responsabilidad como autor de secuestro y 5 años y un día asociación ilícita. Radelli Copolla fue condenado a 10 años y un día por su responsabilidad como autor de secuestro y 800 días por asociación ilícita. El tercero a 5 años y un día por su responsabilidad como cómplice de secuestro y 60 días asociación ilícita.
Los ministros rechazaron los recursos de casación planteados y confirmaron las penas dictadas por la Corte de Apelaciones contra militares en retiro de Chile y Uruguay.
Eugenio Berríos fue un agente de la Dirección de Inteligencia Nacional (Dina), la policía secreta de la dictadura de Pinochet (1973-90), a la que se le atribuye la mayoría de las 3.000 víctimas que dejó el régimen.
Berríos fue responsabilizado de la fabricación en Chile del denominado gas sarín que fue usado contra los opositores del régimen. Su cadáver apareció en una playa cercana a Montevideo en 1995, cuatro años después de huir de Chile para eludir investigaciones en su contra.
Otros 11 militares chilenos fueron condenados como autores materiales, intelectuales y cómplices del secuestro y asesinato.
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