Publicidad

La Medicina y la dedicación

Compartir esta noticia

Cuestión de buena o mala

@|¿Alta dedicación o mala interpretación?
Veo comunicados que hablan de medicina con cargos de alta dedicación: no entiendo.

Las circunstancias y hechos que dieron lugar a esta iniciativa son originarios de 1990, al obtener la remuneración por acto médico, pero borraron con el codo que se concebía desempeñar un cargo en una institución y no dos, tres, cinco. Tema del olvido. Donde al hacer el tour por sus múltiples cargos, obtienen cuantiosas cifras, rememorando en cierto modo el dentista con la carreta recorriendo los pagos, arrancando muelas o vendiendo productos milagrosos. Ahora montados en nuevos modelos.
Si se pretende cambiar, hecho necesario y lógico, uno de los argumentos es la dedicación continua en un solo lugar de trabajo. No lo inventé, alcanza con cruzar el río y concurrir al Hospital Italiano, al Británico o al Alemán de Buenos Aires, para no ir más lejos.

El objetivo, es que el médico desempeñe de manera correcta, con el tiempo necesario, la atención diaria de sus pacientes. Dedicar espacio al análisis de su actuación, utilizando las herramientas del presente para saber el qué y el cómo está. El planteo inteligente de interrogantes que se debaten en ateneos: para investigar re el nuevo conocer. Todo ello lleva tiempo de análisis y de estudio.

Así también la formación de las nuevas generaciones que tienen, entre otras cosas, saber tratar a la gente, y ser gente; pues son el futuro y hay que orientarlos como tales. Porque los médicos forman médicos y cumplir los requisitos que la Medicina pide desde Hipócrates. Una Institución gobernada por gente experiente en pos del progreso, con dedicación al cargo, dando lugar a las especialidades dentro del mecanismo que engrana las diversas particularidades con una sola finalidad: el bien, con eficiencia, experiencia y sin dilación.

Se accede en esos lugares por riguroso concurso y méritos de verdad, donde se asciende si se progresa… o se va. No lo van a degradar por orden de alguien. No va a ganar por designio de…xx, porque allí lo que vale es la Institución y su gente creciendo. Se compite por el futuro.

Ahora, ¿cómo lo ve?, corriendo de un lado a otro cuando el tiempo no le da para cumplir en todos lados; “tarjetear” para decir “estuve”. ¿Puede retribuir correctamente? No. ¿Cuál es el riesgo de yerro? Mucho. ¿Se expone a la mala praxis? Sí. ¿Cuándo estudia, concurre a un ateneo? Nunca. ¿Elabora trabajos científicos en serio? No. ¿Es uno más del montón? Sí. Entonces, ¿qué hace?Gana plata. ¿Puede dormir en paz?...

No es necesario un ejército de médicos, sino buenos y cumplidores, quienes además son la pieza fundamental para la formación y desarrollo de los que vienen o ¿creen que nacen y crecen por generación espontánea?
Si este pilar, que debe estar lleno de telaraña, hubiese sido realidad, no estaríamos como estamos. Por lo tanto no alta sino buena dedicación.
No parece que haya ámbito para propuestas de este tipo, puesto que se deben integrar a un cambio total del médico y de la Medicina en sí, en Uruguay. Implica cambiar todo, con un sistema dominado por capacidad, cumplimiento, eficiencia, seriedad con el pueblo para volver a lo que en un tiempo supo tener la Nación.

Reitero no es plata, son ganas de ser. La Medicina no se gana con politiquería barata. Los ejemplos están llegando a la Justicia, esperemos que sea para bien.

¿Encontraste un error?

Reportar

Te puede interesar

Publicidad

Publicidad