Uruguay está en la segunda región mundial más afectada por tormentas.

Hasta que no pase el verano podrá haber más anuncios de probables ciclones o turbonadas, como el emitido por el Inumet para el próximo lunes. Sucede que en esta estación y en la primavera es cuando se presenta el mejor "caldo de cultivo" para los vientos fuertes, si bien es posible que se registren durante todo el año.

Uruguay se encuentra en la zona de América del Sur con mayor generación de ciclones extratropicales bastante intensos. Y está en la segunda región del mundo más afectada por tormentas severas, después de Estados Unidos, que tiene el llamado "callejón de los tornados", dijo a El País la ingeniera Valeria Durañona.

Esos dos tipos de eventos, que representan un riesgo para la vida de la población, producen daños críticos en infraestructuras, impactan en el agro, en el sector energético, en el de la construcción y en el de los seguros, entre otros. Para disminuir estos efectos es que la Facultad de Ingeniería está trabajando, en coordinación con otras instituciones, en el análisis del comportamiento de los vientos extremos.

Durañona explica que durante bastante tiempo no existió un consenso para darle nombre a tal o cual tipo de vientos severos. Al mismo fenómeno atmosférico, unos los llaman turbonada, y otros: tormentas convectivas o corrientes descendentes.

Este último término es el adoptado por los investigadores de la Facultad de Ingeniería para definir una especie de columna de aire que baja y cuando da contra el suelo se explaya ocasionando vientos muy intensos por el aumento abrupto de velocidad. Cada corriente descendente (o turbonada) puede afectar zonas de cientos de metros o decenas de kilómetros durante algunos minutos y hasta una hora.

Un ciclón extratropical en cambio, produce vientos fuertes sobre la mitad del Uruguay o más, durante varias horas, medio día o algo más de un día.

De acuerdo a un sistema de monitoreo de UTE, hasta ahora hay datos cada diez minutos, de lo cual se desprende que entre una medición y otra las ráfagas pueden cambiar de 15 metros por segundo a 30 o 40, lo que equivale a 140 kilómetros por hora. La mayor velocidad que llegó a medir la red de unas 30 estaciones meteorológicas de UTE ubicadas en todo el país fue de 176 kilómetros por hora, similar a la registrada en Carrasco el 23 de agosto de 2005, cuando se dio un ciclón dentro del cual se formaron turbonadas localizadas.

Una única nube de tormenta (la cumulus nimbus) puede producir turbonadas o también un tornado, o sea una columna de aire que gira a mucha velocidad y en su centro genera baja presión, lo cual provoca la succión de animales, techos y otros objetos. Después de un desastre de esta índole, para saber qué lo provocó hay que llegar a la zona y evaluar los daños de cerca. Si todo está caído para el mismo lado, es muy posible que haya pasado una corriente descendente o turbonada. Si el patrón de afectación es caótico, porque hay cosas dispersas en distintos puntos, ahí pasó un tornado, girando en sentido horario, como ocurre la mayoría de la veces en el hemisferio sur.

Ante la pregunta de si en la actualidad hay alteraciones del clima que provocan más cantidad de turbonadas, ciclones o tornados, Durañona afirmó que es necesario estudiarlo pero ya hay información de muchos años atrás acerca de eventos muy fuertes. En 1900 fue cuando en Uruguay comenzó a registrarse las velocidades de los vientos. El récord se dio en 1935, con una turbonada con ráfagas de viento de 200 kilómetros por hora.

A nivel académico, en Uruguay nadie se atreve a sentenciar si el clima de vientos extremos ha cambiado con el paso de los años. Sin embargo, existe bibliografía e información para llevar adelante este tipo de estudio, aunque se requeriría presupuesto y técnicos dedicados a la investigación durante una serie de años, y también a la comparación con mediciones hechas desde 1900. En la Facultad de Ingeniería, desde 2003, la doctora Valeria Durañona aborda el problema de los vientos severos.

Entre mañana y el lunes podría desarrollarse un ciclón en superficie al sur de Uruguay, entre 40 y 45ºS.

Esto estará asociado a vientos intensos en la zona costera, según lo pronosticado en un informe especial del Instituto Uruguayo de Meteorología.

Luego de las precipitaciones que se dieron el jueves 9, para hoy y mañana se prevé que lloverá otra vez en forma abundante en el norte del país.

Mañana y el lunes las temperaturas máximas no superarán los 21º C en el sur del territorio. En el norte habrá un descenso gradual hasta el martes. Durante el lunes y el martes las mínimas oscilarán entre 13º y 15º C en todo el país. A partir del miércoles las temperaturas se incrementarán hasta el sábado 18.

Los vientos más intensos en Uruguay provienen del sur y el cuadrante suroeste, no hay en general vientos fuertes que provengan del norte. Pero allí en cambio es en donde se han dado los eventos de viento más severos, dijo a El País la ingeniera Valeria Durañona.

Las turbonadas que producen los vientos más intensos son las que duran menos tiempo, como si existiera una relación entre la dimensión del "chorro" y la velocidad.

"Quizás hay un incremento de eventos de viento severos, pero no lo puedo afirmar. Lo que sí es cierto es que hoy existen más estaciones, más población, más estructuras, más comunicación, pasa algo en cualquier lugar y enseguida nos enteramos, hay gente sacando fotos o haciendo videos con celulares en casi todas partes del país, y compartiendo esa información", sostuvo Durañona, especialista en eventos severos de viento, su descripción, climatología y consecuencias en Uruguay y la región.

Durañona integra el Instituto de Mecánica de los Fluidos e Ingeniería Ambiental de la Facultad de Ingeniería. Trabajó en proyectos vinculados por ejemplo a los efectos del viento sobre aerogeneradores y parques eólicos, o sobre el servicio de distribución de energía eléctrica de UTE.

ADVERSIDAD CLIMÁTICA