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Poesía LXII

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Sergio Altesor

Con Sergio Altesor

Sur

No hay palabras para el paso del tiempo
cuando la realidad está en el sur.

Sur en donde lo posible es imposible. Sur
que atormenta al ser e inflama la memoria.

Olas gigantes incesantes aparen
temente lentas moldean el corazón
de la misma manera que el océano
pule cantos rodados.

Paso del tiempo suburbios de memoria.

La irrealidad del norte
se borra con rapidez de la esperanza
mientras el sur te quema o graba como el ácido
sus fotografías
en el cuero diario del dolor,
cuenco del sueño o del amor al sol.

Colas de zorro ortigas cardos y cardillos
carqueja contrayerba cortadera culantros
lucera alas de loro guaraninas abrojos
paja brava verdolagas atamisques puyas
paja blanca abrepuños pisingallos borrajas
caraguataes uñas de gato ispágulas
clavel del aire áloes garbancillos chilcas
cebadilla encenillos colas de caballo
verbena macachines retamas espinillos
yerbabuena ajonjeros barbascos sensitivas
creciendo en los intersticios que tiene la desdicha.

Cielos del sur,
pasteles de las almas solitarias,
acuarelas de la luz herida,

nubes que corren siempre hacia el pasado
y luego chapas, carteles luminosos
aceras sucias veredas bondadosas
baldosas rotas por la luna quebrada
bajo el enfermo cielo de la melancolía.

La realidad está en el sur,
en el fuego negro y en el fuego rojo,
en el polvo de tierra y en la tierra mordida
y en la tierra seca y en las moscas negras.
En las caras deformadas por la desilusión
y en los rostros quemados
por esa enfermedad de la esperanza.

Ir de la mano del que se ha perdido,
pisar los pasos de su sombra.
No hay palabras para el paso del tiempo.
No hay tiempo en las palabras que pasaron.
Perdido va el que sigo
entre la irrealidad del norte
y la vitalidad mortal del sur,
entre la noche,
las sombras del amor sucumbido,
la basura la humedad los perros
que cruzan la igualdad del olvido.

                                   (tomado de El sur y el norte, 2012)

El autor.

Escritor, periodista y crítico de arte nacido en Montevideo en 1951. Estudió en la Escuela Nacional de Bellas Artes (Uruguay), en el University College of Arts, Crafts and Design (Suecia), en el Instituto de Lenguas Románicas de la Universidad de Estocolmo y en la Facultad de Humanidades (UdelaR, Uruguay). Trabajó más de diez años como artista plástico durante los cuales realizó múltiples exposiciones individuales y colectivas. Fue docente de dibujo experimental y grabado en Konstskolan (Estocolmo, Suecia), de talleres de redacción en el Departamento de Comunicación de la Universidad ORT-Uruguay, asesor del Departamento de Artes Plásticas de la Dirección Nacional de Cultura (Ministerio de Educación y Cultura, Uruguay) y Editor de Cultura del semanario Manos. Escribe en El País Cultural desde 1996. Desde 1998 dirige talleres de periodismo cultural. Ha publicado los libros de poesía Río testigo (1973), Trenes en la noche (1982), Archipiélago (1984), Diario de los últimos días del archipiélago (1995), Serpiente (1999), 17 poemas de Diario de los últimos días del archipiélago (2002), Telegrambyrå (2008), El sur y el norte (2012) y la novela Río Escondido (2000), obras por las cuales recibió, entre otros, el Premio Nacional de Literatura del Ministerio de Cultura del Uruguay (2000), el Premio Literario Municipal de la Intendencia Municipal de Montevideo (1997), el Premio Posdata (2000) y el Fondo de los escritores de Suecia (años 1983, 1984, 1985, y 2001).

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