CALIDAD DE VIDA
La prevención primordial apunta a evitar los factores de riesgo como el sobrepeso y la obesidad, el sedentarismo, el tabaquismo, la hipertensión, la diabetes y el colesterol elevado.
Al hablar de arterioesclerosis, para el cardiólogo Fernando Machado no basta con hacer hincapié en la prevención primaria, sino que hay que garantizar la “prevención primordial”.
La diferencia es que, mientras la primaria apunta a mantener la salud del individuo una vez que los factores de riesgo ya están instalados en su organismo y estilo de vida, la primordial actúa antes. “Tenemos que actuar en los primeros años de vida para ser efectivos”, afirmó en entrevista en el ciclo Calidad de Vida en El País.
En este sentido, la prevención primordial apunta a evitar los factores de riesgo como el sobrepeso y la obesidad, el sedentarismo, el tabaquismo, la hipertensión, la diabetes y el colesterol elevado.
“La arterioesclerosis tiene una causa clara que es la acumulación de colesterol en las arterias favorecidas por factores de riesgo de estilo de vida o genéticos que pueden acelerar ese proceso”, definió Machado.
La prevención primaria “a veces llega tarde”, apuntó. La secundaria es la que interviene cuando ya ocurrió un evento adverso: el paciente ya sufrió un infarto o un accidente cerebrovascular. “Podemos actuar para evitar uno nuevo pero el individuo probablemente puede tener secuelas importantes y devastadoras”, añadió.