Pasaron 15 años de la primera vez que Catupecu Machu tocó en Uruguay. Plaza Mateo estaba abierto y al ritmo de "Eso Vive" Catupecu se posicionaba como una de las bandas más prometedoras del rock argentino.

Fue la primer visita de varias, y eso se notó en el público de ayer, que abarcaba desde adolescentes hasta cuarentones. A las 21.40 los músicos salieron al escenario. Fernando Ruiz Díaz a la cabeza con su típico traje negro y largo, pese al calor agobiante de la sala.

La banda abrió con "El grito después" —uno de los temas originales de El Código Genético, su disco recopilatorio. Y después de un típico "¿Qué Pasa Montevideo?" entró en el setlist que repasó sus 20 años de carrera. Canciones como "Confusión", "Óxido en el aire", "Gritarle al Viento", "Plan B" y "En los sueños" abarcaron la primera hora show. Desde el principio, el profesionalismo de la banda se hizo notar. El sonido oscuro que caracteriza los últimos años de Catupecu sonó agresivo y prolijo, acompañado de un show de luces que rozaba lo epiléptico. Ni siquiera se notó la ausencia en guitarra de Díaz, quien tenía una lesión en su mano.

Para mitad del show, el cover de "Across the Universe" de los Beatles dio pie a un monólogo de Ruiz Díaz, que entre agradecimientos, reflexiones, historias de su hija y su hermano Gabriel, explicó que no podía tocar la guitarra porque hace unos días se rebanó un dedo mientras cortaba el pasto. También habló de la experiencia de ser teloneros de Ringo Starr hace unos días, en el Planetario de Buenos Aire. Dijo que no lo quiso saludar para no molestarlo, pero lo tuvo al lado y pudo comprobar está impecable. "Está todo fibroso, con el culo parado" fueron sus palabras, aunque a esa altura no se podía escuchar mucho, dado que algunos chiflaban y le gritaban que terminara el discurso y diera paso a la música.

Después del monólogo, Ruiz Díaz pidió un aplauso para Emiliano Brancciari, "este muchachito lindo" que subió al escenario para cantar "Magia veneno", la sorpresa de la noche. Un ejército de celulares salió a registrar el momento, reivindicando esa molesta costumbre. Hacia el final, la banda siguió repasando sus primeros discos, quizás su mejor época. "A veces vuelvo", "Dale", "Y lo que quiero es que pises sin el suelo" fueron de los temas más coreados. Para el cierre Ruiz Díaz cantó una versión a capella de "Puedes", con una nueva dedicatoria a su hermano.

Catupecu cumplió, demostrando que después de 20 años y tantos golpes recibidos, todavía pisa firme sin el suelo.

Lugar: La Trastienda Club Montevideo. Fecha: 4 de marzo Artista: Catupecu Machu. Integrantes: Fernando Ruiz Díaz (voz), Agustín Rocino (batería), Martín González (teclados, bajo y coros) y Sebastián Cáceres (guitarras y bajo).

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