@|En el medio rural viven unas 500.000 personas, de las cuales 300.000 habitan en pequeñas poblaciones y unas 200.000 aisladas en el medio rural.
Esto hace compleja su asistencia médica y el darle satisfacción a sus necesidades.

Dadas las características de nuestro país, agrícola ganadero, ellos son los que producen la riqueza nacional y todos los alimentos que diariamente ponemos en nuestra mesa.

Sin embargo, la familia rural no cuenta habitualmente con el reconocimiento que merece en relación a su trabajo, su producción y su sacrificio de vida.

Para un país, los más importante son sus habitantes y para ellos lo más importante es la salud.

Esta población es asistida actualmente por unos 300 médicos rurales que viven en el medio y trabajan asistiendo en consultorio, en domicilio, abarcando también la zona rural, a veces a quilómetros de distancia y alejados de la capital.

Asisten desde el control de la embarazada, eventualmente el parto y hasta acompañan al enfermo en las etapas finales de la vida.

No les basta con saber solo medicina general, ya que deben asistir patologías habitualmente a cargo de especialistas, realizar técnicas que generalmente se llevan a cabo a nivel hospitalario, asistir a todo tipo de emergencias y accidentes las 24 horas del día, los siete días de la semana, y hasta en ocasiones actuar como auxiliares de la justicia. No cuentan con laboratorio, ni estudios diagnósticos y en ocasiones tienen dificultad para el traslado de pacientes graves.

Y todo esto actuando en soledad.

Los médicos rurales, además de tener como objetivo la salud del individuo y su familia, deben también participar en la solución de los grandes problemas de salud de la comunidad, de la higiene ambiental, realizar educación para la salud, participar en distintas comisiones, en gestiones departamentales y nacionales, etc.

Sin embargo, las autoridades siempre han mirado para el costado cuando se ha hablado de la problemática asistencial en el medio rural, a pesar de que, como señalamos, se asisten unos 500.000 uruguayos, así como cuando se ha hablado de una justa retribución, actualmente su salario de Salud Pública mensual es el equivalente al pago de una cirugía mayor de algunas especialidades en una institución mutual.

La Sociedad de Medicina Rural aspira y lucha desde hace años por que su tarea sea considerada una especialidad, que se establezca un régimen de trabajo, facilidades para su instalación y los medios necesarios para la asistencia.

El código de ética médica señala que “los profesionales de la medicina deben cuidar la salud de las personas y de la comunidad.”, a lo que agregamos y los gobiernos la obligación de organizarla, así como asegurar a los médicos rurales una justa retribución.