Renovación de 4G aumenta tensiones entre telefónicas por "inequidad anticompetitiva"

MIEM la decretó de manera automática; Claro debería invertir casi US$ 100 millones por la renovación de sus espectros en 4G, el segmento y la red para implementar el 5G.

Claro.
Foto: Fernando Ponzetto
  • Facebook
  • LinkedIn
  • Twitter
  • Email

Este contenido es exclusivo para nuestros suscriptores.

Por Lucas Elmallián
Mientras que la subasta por los espectros de 5G aún se mantiene en vilo de la presentación del Pliego de Bases y Condiciones para el proceso competitivo , la renovación automática de los acuerdos por los segmentos de 4G levanta tensiones en el sector de las telecomunicaciones. Según Claro, el decreto de la renovación “debe ser revisado porque genera una inequidad anticompetitiva y además perjudica al Estado”.

A fines de noviembre, el Ministerio de Industria, Energía y Minería (MIEM) presentó un decreto que habilita la renovación automática del espectro del 4G de aquellos acuerdos que se realizaron entre 2002 y 2004, en los que participaron Antel, Claro y Movistar.

En este documento, se señala que hay más de 6 millones de servicios móviles activos en el país, atendidos por las tres operadoras.

Según este decreto, las empresas deberán abonar a la Unidad Reguladora de Servicios de Comunicaciones (Ursec), por la utilización del espectro, “el mismo precio que abonaron cuando se les asignó su utilización”.

En este contexto, Claro presentó un recurso administrativo en diciembre, en el cual pidió al gobierno que anule el decreto ya que rechazan que se hayan mantenido los precios que las tres empresas pagaron hace 20 años.

El País se comunicó con Movistar y Antel para conocer su opinión sobre el decreto, pero por cuestiones de agenda no participaron de la nota.

Por su parte, el director de Asuntos Regulatorios e Institucionales de Claro Argentina, Uruguay y Paraguay, Alejandro Quiroga López, explicó a El País que los acuerdos sobre los que trata el decreto se deben a dos bandas, la de 850 megahertz (MHz) y la de 1.900 MHz.

Sobre estas bandas, que funcionan como rutas para enviar los datos, explicó que la banda de 850 MHz, es “considerada baja, de alta prestación porque tiene muy buena penetración indoor (interior). Muy buen alcance y buena capacidad. Es muy valorada porque tiene más atributos respecto de otras bandas”.

“La otra banda, que se denomina alta, de 1.900 MHz, es una banda que para dar el mismo resultado de cobertura, requiere mucho más equipamiento, porque tiene otras características”, agregó.

Con respecto a la distribución de los espectros en estas bandas, en diciembre de 2022 se vencía el acuerdo de Movistar por un bloque de 10 MHz en la banda de 1.800/1.900 MHz, por el cual había pagado US$ 6 millones por 20 años. Asimismo, en julio de 2024 se vencerán sus acuerdos por un bloque de 10 MHz en la misma banda y otro bloque de 25 MHz en la banda de 850 MHz, por lo cuales había pagado también US$ 6 millones por cada uno.

En tanto, a Antel se le vencerá su acuerdo en julio de 2023 por 30 MHz en la banda 1.700/1.800 MHz, por el que había pagado US$ 18 millones por 20 años de uso.

Por su parte, a Claro se le vencerá su acuerdo en junio de 2024, por 30 MHz en la banda 1.800/1.900 MHz, por el que había pagado US$ 18,12 millones por 20 años de uso.

“La regla que se estableció es que se pague el mismo precio que en su momento. Ahí viene lo que parecería o podría ser razonable, que es ¿qué pasó con el servicio que se pagó en su momento? ¿Qué pasó en el mundo?”, dijo Quiroga López.

“Ursec hizo un informe técnico donde analizó la banda de 1.900 y lo que había pasado es que revisó 22 subastas en 19 países. Eso concluyó de que el precio debería bajar casi 28,7%, menos que el precio que se pagó en forma original”, sostuvo.

En este sentido, según el cálculo de la Ursec para determinar el resultado del cálculo normalizado de lo pagado en su momento, señaló que para las bandas relativas a la de 1.900 MHz, para Antel y Claro los precios serían casi US$ 12, 850 millones, mientras que para Movistar superarían los US$ 4,283 millones.

En tanto, sobre la banda de 850 MHz analizada entre los años 2018 y 2022, la Ursec señaló que “de la información obtenida no surgen datos estadísticos ni insumos relevantes suficientes para compartir el presente informe”.

En tanto, el directivo de Claro señaló que “hay una cuestión adicional que no se explicita, es que ese espectro de 850 MHz no tuvo un precio de subasta sino que lo acudieron con canje entregando un bloque de 10 MHz en la banda de 1.900 MHz y por cuestiones especiales les permitieron llevarse muchos más espectros”.

“Entonces, la situación es que para esta renovación hay una banda de espectros que está analizada, valuada y que el regulador dice que este debería tener un precio inferior al que tuvo hace 20 años, mientras que la otra banda de 850 MHz no tiene valuación”, agregó.

Por esto, sostuvo que la determinación de pagar el mismo precio “tiene que ser un error, no puede haber otra cosa”.

Por otra parte, señaló que en Uruguay se asignaron bloques de 10 MHz por US$ 10 millones en 2015, por 20 años de uso, para la banda de 700 MHz, “equivalente” a la de 850 MHz. “Es decir que el valor por el MHz de banda es US$ 1 millón. Si uno lo traslada a la banda de 850 MHz el precio debería ser de US$ 25 millones”.

Por esto, de mantenerse el pago de US$ 6 millones por este bloque, señaló que Movistar estaría pagando US$ 19 millones menos, de acuerdo a este criterio de comparación.

“Estamos sobrepagando respecto al valor que se está fijando para una banda que da muchas menores prestaciones”, agregó.

En tanto, destacó que el Estado uruguayo espera recaudar US$ 54 millones con las renovaciones. “Si hicieran un análisis profundo de la banda de 850 MHz, a lo mejor recaudarían US$ 73 millones”, dijo Quiroga López.

“Nosotros decimos ‘ajustás el valor de la banda de 1.900 MHz a la baja o corregís la de 850 MHz que no está fundado”, concluyó.

Ver las últimas noticias