El presidente estadounidense, Barack Obama, condenó ayer de manera "enérgica" el atentado contra la revista francesa Charlie Hebdo en París y prometió a Francia brindar ayuda para detener a los responsables.

Obama subrayó que "Francia es el aliado más antiguo" de su país y que ha estado "hombro con hombro" con la Casa Blanca "en la lucha contra el terrorismo".

"Una y otra vez, los franceses han defendido los valores universales que varias generaciones han defendido", expresó Obama.

París "ha estado hombro con hombro junto a nosotros en el lucha contra el terrorismo que amenaza nuestra seguridad y la del mundo", aseveró el mandatario norteamericano.

"Francia, y la gran ciudad de París, donde este escandaloso ataque tuvo lugar, le brindan al mundo un ejemplo que perdurará más allá de la visión de odio de estos asesinos", agregó Obama.

"Estamos en contacto con las autoridades francesas y he ordenado a mi gobierno que preste toda la asistencia necesaria para ayudar a que estos terroristas sean llevados ante la justicia", acotó resuelto.

Por su parte, el secretario de Estado norteamericano, John Kerry, afirmó que "la libertad de expresión no puede ser asesinada".

"Los asesinos se atrevieron a proclamar que Charlie Hebdo está muerto, pero no nos engañemos, están equivocados", subrayó.

“El aliado más antiguo”