TRAGEDIA

Al menos 43 personas murieron y decenas resultaron heridas en un choque de dos trenes de pasajeros tras un descarrilamiento ayer lunes en el sur de Pakistán.

El accidente fue de madrugada cerca de la ciudad de Daharki, en la provincia de Sindh, a la que los equipos de rescate tardaron horas en llegar. Un tren proveniente de Karachi descarriló y luego fue embestido por otro procedente de Rawalpindi, que circulaba en el sentido contrario.

“Caímos unos sobre otros, pero eso no fue tan fatal”, dijo Akhtar Rajput, un pasajero del convoy que descarriló.

“Luego otro tren nos golpeó de la nada y más fuerte. Cuando recuperé el conocimiento, vi a los pasajeros tirados a mi alrededor, algunos intentaban salir del vagón”, agregó.

Una multitud se reunió alrededor de los vagones volcados tratando de socorrer a los sobrevivientes.

Imágenes captadas por teléfonos celulares mostraban una maraña de hierros retorcidos y varios vagones verdes de la Pakistan Railways volcados. Cerca de la vía se veían los cuerpos de las víctimas colocados uno al lado de otro.

El primer ministro paquistaní, Imran Khan, dijo que estaba “conmocionado”. “Estoy ordenando una amplia investigación sobre las fallas en la seguridad ferroviaria”, afirmó en Twitter.

Los accidentes ferroviarios son comunes en Pakistán, que tiene una red ferroviaria en decadencia desde hace décadas. Más de 300 personas murieron y 700 resultaron heridas en 1990 cuando un tren de 16 vagones con exceso de peso chocó contra un tren de mercancías estacionado cerca de la ciudad de Sukkur. En octubre de 2019, al menos 75 personas murieron en un incendio en el tren en que viajaban de Karachi a Rawalpindi.