INMIGRANTES

Asesorarán a extranjeros para que continúen sus estudios.

Venezolanos, cubanos, portorriqueños y dominicanos han elegido Uruguay como su nuevo hogar para vivir y encontrar un mejor pasar económico. El país vive una nueva ola migratoria como no ocurría desde las primeras décadas de siglo pasado.

El gobierno de Tabaré Vázquez prepara una serie de medidas para atender las demandas de los extranjeros que se han instalado en el país.

En ese sentido definieron facilidades para otorgar las residencias y planes de seguimiento educativo para los hijos de las familias que llegan al Uruguay.

A su vez el Ministerio de Trabajo y Seguridad (MTSS) trabaja en planes de capacitación específicos para familias que han llegado al país en los últimos meses y cuyos integrantes aún no han conseguido trabajo.

El presidente Vázquez ha conversado con su equipo de gobierno sobre la problemática del empleo y la necesidad de implementar medidas que fomenten la contratación de nuevo personal por parte de las empresas.

En ese sentido el ministro de Trabajo, Ernesto Murro, trabaja en un paquete de propuestas legislativas que enviará al Parlamento en las próximas semanas, anunció.

Educación y trabajo son las dos aéreas que desde el Poder Ejecutivo se resolvió atender para las colectividades de familias extranjeras que están llegando al país.

Por eso el martes 15 quedará instalada una oficina específica de atención y asesoramiento para migrantes sobre los planes educativos.

El centro de atención funcionará en el IMPO, frente a la Intendencia de Montevideo. Las acciones serán coordinadas por la Dirección de Educación a través de Sistema Nacional de Educación Pública (SNEP) para asegurarles a las familias to- dos los derechos en materia educativa.

Parte del asesoramiento se centrará en poner en marcha todo el sistema de revalidación de títulos, para que los inmigrantes puedan continuar los mismos estudios que hacían originalmente en su país.

Desde el Ministerio de Educación y Cultura (MEC) explicaron a El País que el asesoramiento será flexible y adaptado a las demandas de las familias extranjeras.

"Es un apoyo en materia educativa, pero sin duda es ayudar al proceso de adaptación en general al nuevo país", comentaron a El País desde el Ministerio de Educación.

"El Estado Uruguayo procurará que las personas migrantes y sus familias tengan una rápida incorporación a los centros educativos públicos, habilitados o autorizados tanto para iniciar como para proseguir sus estudios. En todos los casos deberán cumplir con los requisitos establecidos para los ciudadanos nacionales", establece el decreto 394/009 que regula la educación para los migrantes.

En ese texto se establecen los cometidos del Poder Ejecutivo para facilitar la incorporación de los extranjeros a los ámbitos educativos.

"A efectos de asegurar a los hijos de los trabajadores migrantes el derecho a la educación, las instituciones receptoras públicas habilitadas o autorizadas, en caso de que no reúnan la documentación para su inscripción, realizarán la misma con carácter provisorio por un plazo de un año, haciendo valer esta disposición", dice el artículo 48. En caso de que esa documentación no sea posible de conseguir, producto de dificultades con el país de origen, será el Ministerio de Educación quien expida la habilitación.

La ola migratoria que vive Uruguay se inició lentamente en 2009. Ese año fueron más las personas que llegaron al país para radicarse que las que decidieron salir a buscar nuevos rumbos.

A su vez el gobierno prevé que este fenómeno tenga un nuevo pico en los próximos años cuando se confirme la instalación de la segunda planta de celulosa de UPM. La construcción de la fábrica implicará unos 3.000 puestos de trabajos directos.

Los dos niños dominicanos a los que la oficina de Migraciones les impidió ingresar a Uruguay cuando pretendían reunirse con su madre ya instalada en el país, volverán la semana próxima.

El País informó el sábado 5 que el encargado de migraciones del Aeropuerto de Carrasco les negó el ingreso a los niños por un problema con la visa.

El documento establece un vencimiento de 90 días, pero en la letra chica se dice que el primer ingreso debe ser realizado antes de los 60 días. Los chicos llegaron a Montevideo en el día numero 63.

"Mis niños vienen la próxima semana, aún no está fijado el día, no está estimada una fecha de regreso, pero el gobierno se comprometió a traerlos", dijo Elizabeth, la madre de ambos chicos ayer al portal web Ecos.

La mujer comentó que en la semana mantuvo contactos con el Ministerio de Relaciones Exteriores, que se comprometió a facilitar el ingreso. "Ahora ellos se van a comunicar con la aerolínea para ver si se hacen cargo de los pasajes para que mis hijos puedan volver o se busca otra alternativa", explicó.

La madre de ambos niños ya mantuvo contacto telefónico con sus hijos. En su relato dijo que los chicos estaban con temor de volver a viajar a Montevideo por miedo a que nuevamente no los dejen ingresar.

Sin embargo tiene el compromiso de Cancillería de que no volverá a haber problemas.