El gobierno nombró a Christian Mirza interlocutor ante los ex presos.

El gobierno les insistirá a los liberados de Guantánamo que deben firmar un convenio si quieren avanzar en su proceso de inserción en Uruguay y traer a sus familias, algo a lo que se niegan cinco de ellos. Cuatro de los seis liberados continúan en la rambla frente a la embajada de Estados Unidos donde ya pernoctaron dos noches y el gobierno no tiene intención de pedirles que se retiren porque entiende que tienen "absoluta libertad de movimiento", dijo a El País el canciller Rodolfo Nin Novoa.

El gobierno quiere poner énfasis en que deben firmar el convenio. "Seguimos atentamente el tema. Tienen que firmar el convenio que tiene vigencia hasta febrero de 2016 y que básicamente les pide que aprendan español para que puedan tener una inserción laboral y que cuiden su salud", señaló el canciller.

Los liberados crearon un blog en el que señalaron que "Sedhu (representación local de la agencia de la ONU para los refugiados, Acnur) es la organización que estuvo ayudándonos con dinero, pero ahora nos cortaron esa ayuda porque nos negamos a firmar los papeles que nos trajeron, porque las condiciones que allí se plantean son diferentes de las que acordamos de palabra con el Ministro de Relaciones Exteriores". Sin embargo, Nin Novoa, aseguró que "no es así" y que la única vez que se reunió con ellos fue con el texto del convenio a la vista. El canciller dijo que cuando se conversó con ellos estaban "agradecidísimos" y que él mismo había "persuadido" al sirio Abu Wael Dhiab de que no se manifestara frente a la embajada de los Estados Unidos.

Los refugiados quieren una vivienda para cada uno, que se les entregue más dinero y que se facilite la llegada de sus familias. "Ellos tienen la libertad de encarar acciones penales y civiles. Han sufrido una injusticia. Hay que ponerse en su lugar y tener cierto grado de empatía. Uruguay ha hecho todo lo que está a su alcance, ha hecho un gran esfuerzo solidario toda su sociedad. Tienen que firmar el convenio y no me parece que sea tan difícil", insistió el canciller. "Uruguay no los va a dejar tirados", aseguró.

Ese paso es imprescindible para que el gobierno pueda definir, por ejemplo, el tamaño de la vivienda que le dará a Dhiab que parece ser el que estaría más cerca de traer a su esposa e hijos desde Turquía donde están refugiados, ejemplificó.

Los refugiados sostuvieron también que organizaciones de derechos humanos los asesoraron y les aconsejaron que no firmaran el convenio aunque uno de ellos, el palestino Mohamed Tahanmatan sí lo hizo y permanece en la casa del barrio de Palermo donde se instalaron los seis hombres en diciembre.

En cualquier caso, pareciera que Sedhu tiene autonomía para manejarse en el asunto con respecto a Acnur. La funcionaria de Acnur para la región, Michelle Alfaro, dijo a El País desde Argentina que "no tengo la menor idea de lo que está pasando" y que "no manejamos la relación con ellos porque el proyecto con el gobierno lo tiene nuestro socio " (Sedhu).

Ayer en la rambla los refugiados caminaron, hablaron por celular, conversaron con personas que pasaban por allí y tuvieron bebés en brazos.

Los refugiados señalaron en el blog que crearon que "cuando nos entrevistamos con el ministro nos dijo que nosotros somos refugiados políticos y nos prometió que mientras viviéramos en Uruguay, el gobierno nos proveería con viviendas, y también dijo que cubriría las cuentas (agua, luz, gas e internet) durante tres años". De todas formas, en otro pasaje del texto señalan que la responsabilidad de mantenerlos debería recaer en Estados Unidos.

Nin Novoa adelantó a El País que hoy la cancillería difundirá una resolución que nombra a Christian Mirza como interlocutor permanente del gobierno uruguayo ante los refugiados de Guantánamo. Mirza nació el 21 de marzo de 1957 en El Cairo (Egipto). Tiene una maestría en Ciencias Políticas y una Licenciatura en Trabajo Social. Fue director nacional de Políticas Sociales del Ministerio de Desarrollo Social. Fue también director del Instituto Social del Mercosur y docente en la Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad de la República.

Mirza se ha mostrado siempre solidario con la causa palestina y ha lucido en actos públicos el tradicional pañuelo palestino (ver foto). En agosto pasado adhirió a un mensaje de la "Red en Defensa de la Humanidad" en el que se señalaba respecto a los ataques israelíes a la franja de Gaza: " ¡Basta ya de llamar guerra al genocidio perpetrado por uno de los ejércitos mejor armados del mundo contra un pueblo cuyos recursos defensivos son infinitamente inferiores en número y calidad!". Integra desde hace varios años la Comisión de Apoyo al Pueblo Palestino.

Es probable que los refugiados abandonen el lugar de la rambla donde se instalaron el viernes si algún funcionario de la embajada de Estados Unidos los recibe. Hasta ahora, la posición de la embajada es que no hay problema en que permanezcan allí porque es un espacio público.

Uno de ellos, el sirio Ahmed Adnan Ahjan irá hoy a su tratamiento habitual en el hospital Saint Bois con oftalmólogos cubanos que lo están tratando por sus problemas de visión acompañado de militantes del PIT-CNT.

Cuatro de los seis refugiados durmieron frente a la embajada tres noches en sacos de dormir. Uno de los refugiados ,el palestino Mohamed Tahanmatan aceptó las condiciones de Sedhu y no los acompaña en tanto el sirio Abu Wael Dhiab, que se desplaza en muletas y tiene complicaciones de salud, tampoco está allí. Dhiab realizó varios ayunos cuando estaba en Guantánamo para protestar por su reclusión. Uno de sus hijos murió durante la guerra civil siria y su mujer y restantes hijos están en Estambul. Dhiab es aparentemente el más interesado en la reunificación familiar y la atención de su caso recibe una ayuda prioritaria del gobierno. Dhiab fue a Buenos Aires pero ahora ni él ni ninguno de los otros refugiados puede volver a Argentina porque este país les pide visa.

VEA EL VIDEOJUAN PABLO CORREA